La pasada temporada de Copa del Mundo de esquí alpino destacó entre otras cosas por las victorias y podios logradas por dos marcas recién llegadas. Una fue Van Deer de Marcel HIrscher, quién logró un par de victorias y 11 podios con Henrik Kristoffersen, sin desmerecer el triunfo de Timon Haugan en las Finales de la World Ski Cup Soldeu-2023.
La otra marca 'nueva' era Kastle. Puesta entre comillas porque si bien durante los '70 y '80 los de Hohenems (Austria) habían dominado la Copa del Mundo y lo Juegos Olímpicos con 132 victorias, tras la muerte de su fundador y posterior venta a la familia Benetton, se retiró de la alta competición y pocos años después incluso del mercado al fusionarse con Nordica.
Solo quedó el nombre, que fue lo que la familia Benetton vendió a un grupo de empresarios austriacos que lo querían para lanzar una nueva gama de esquís para fuera pista. No les fue mal, hasta el punto de que en 2017 la austriaca Lorraine Huber se convirtió en campeona del mundo de freeride con esquís Kästle.
Un año después, en 2018, el empresario checo Tomáš Němec, un multimillonario propietario de la marca de esquís Sportec, se quedó con la marca Kastle. Apasionado de las carreras de Copa del Mundo inició un proyecto para devolver a Kastle el esplendor en la alta competición.
A punto estuvo de hacerlo por la puerta grande, después de que en 2019, anunciaran que fichaban a nada menos que a Katharina Liensberger. Pero la austriaca estaba con Rossignol, y los franceses no querían dejar que corriera con Lange. Kastle no tenía todavía una marca de botas, así que el fichaje no fructificó y la marca se quedó sin 'debutar'.
El año pasado volvió a la carga y fichó a dos estrellas: la eslovena Ilka Stuhec, que es quién le ha dado 4 podios, dos de ellos con victoria, y la checa Esther Ledecka, una corredora llamada a ser toda una estrella mediática del esquí. Se mueve bien en las redes sociales, y ya logró la gesta histórica de llevarse un oro olímpico en Snowboard y otros en Esquí en PyeongChang 2018. Lamentablemente una lesión la ha dejado fuera toda la temporada.
Esta semana Kastle ha anunciado el fichaje de una tercera corredora: Jasmine Flury. La esquiadora suiza de 29 años es la actual campeona de Descenso tras su oro en los Mundiales de Méribel-Courchevel 2023. También cuenta con dos podios en la Copa del Mundo, uno de ellos por su victoria en el Descenso de Garmisch-Partenkirchen en 2022. Corría con Fischer, y ahora pasará del negro y amarillo al negro y menta.
El Director General de Kästle, Alexander Lotschak, se mostró muy satisfecho con la nueva incorporación:
"Poder dar la bienvenida a Jasmin a la familia Kästle nos llena de orgullo. Pero también somos conscientes de nuestra responsabilidad. Al fin y al cabo, es una esquiadora suiza de Kästle y, por tanto, sigue los pasos de la antigua campeona Pirmin Zurbriggen".
Con su firma, la campeona del mundo Jasmine Flury completa el potente equipo de velocidad en torno a la doble campeona del mundo, Ilka Štuhec, y la campeona olímpica, Ester Ledecká, que ya tienen contrato con Kästle desde el invierno pasado. Un trio de oros que esperan poder recoger el testigo de Primin Zurbriggen, quién llenó las vitrinas de Kastle con sus victorias en la Copa del Mundo de esquí alpino.
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La esquiadora Jasmine Flury ha fichado por al Kastle Team Racing
