Que viene a ser algo así como la región de los campeones.
Y estos no van de farol, porque estos si que son auténticas "referencias mundiales". Fijaos la pantilla de los elementos que han aprndido a esquiar y a deslizarse por sus pistas:
Herman Maier
Michael Walchofer
Hannes Reiter
Hannes Reichelt
Andreas Schiferer
Brigitte Obermoser
Michaela Kirchgaser
Andrea Fischbacher
¡Porca miseria!, que dirían sus vecinos transalpinos....
Cuando en España nos sale una Maria José Rienda, un Paco Fernández Ochoa o una Blanca Fernández Ochoa, nos dedicamos a tocar las trompetas del triunfalismo toda una troupe de federativos, políticos y demás gentuza se ponen a vivir de esas raras flores de invernadero del ruedo ibérico.
¿Os imaginais que los políticos del Estado Federado de Szalburgo tuvieran que darse un homenaje, incontables viajes y esplendidas regalias a costa no sólo de estos campeones, que son sólo los de la región de Szalburger Sportwelt, sino de la de todos los campeones de la zona?
Y además no sólo se trata de esquiadores, porque ahora estamos con Mozart como si fuera el Paquito Ochoa de la música del barroco del siglo siglo XVIII
Porque además de una lista de campeones del esquí os voy a hacer una lista de los campeones de la música en Autria, y que comprende desde la época barroca hasta la contemporánea.
El barroco, de indudable influencia española, aunque no le guste a algúno de mis contertulios informáticos, tuvo en la música una barrera que se estableció en Viena ante los avances del mundo musulmán (¿os suena eso ahora?) y se vacunaron contra ese avance optando por lo que algún autor llama "la vocación espiritual de latinidad....arrastrada por el ideal ibérico de Carlos V"
O sea que los austriacos, frente al empuje de la morisma utilizaron buenos buenos músicos, y además música latina/española, un antecedente de la Alianza de Civilizaciones de Zapatero
Ahí va la lista de los campeones de la música austriaca, porque ese país no sólo vive de esquiadores:
c.W. Gluck que va a ser el que ponga música a lo último que oiga en mi vida, con su Orfeo y Urídice.
F.J. Haydn, el de la Sinfonía de los Juguetes y su poema épico la Cración, cuyos primeros compases hacen comprender mejor el bing bang, que las pinturas de la capilla sixtina
Un tal W.A. Mozart, muy conocido en su casa a la hora e comer
El gran Beetoven, que aunque era de Bonn decidió largarse a Viena donde está enterrado, por que había mejores pistas para esquiar.....
Franz Schubert el del quinteto La trucha y otras músicas descriptivas, poresagio del minimalismo actual.
Johan Strauss, que nos alegra, a distancia, el año nuevo con su valses
Y ya más recientes Anton Bruckner, cuya 5ª Sinfonía me gustaba ir a oir en la casette del coche tras las noches de farra granadaina viendo amanecer en el tajo del Veleta, hasta que los vándalos del oeste me cerraron la carretera.
Anton Webern de música trepidante
Arnol Schonberg, el de la Noche Transfigurada
Alban Berg cuyas notas contemporáneas son difícles de tratag a primer oñido, pero luego se fijan en tu mente y no puedes olvidarlas.
¿Os dais cuenta porqué digo ahora que ma pasión es austríaca?
Y terminada la lista de campeones, de esquí y de música, volvamos a la espléndida realidad de Ski Sportwelt.
Es la zona más grande y accesible de todas las que componen Ski Amadé, con un total de 350 km de pistas, de las cuales 140 km son de pistas azules, 170 de pistas rojas y 40 de pistas negras.
Se accede por la autopista A10 dirección Vilach y pasada la ciudad de Bischoshofen (que literalmente quiere decir la ciudad donde recibían al arzobispo) se sigue por la autovía dirección Radstadt, que es la última del dominio esquiable.
Por supuesto todo está perfectamente señalizado para acceder desde la autopista a las distintas estaciones, que son de oeste a este y por poner sólo las más importantes:
St Johan Alpendorf
Wagrain
Kleinarl
Eben im Pongau
Flachau
Flachauwinkel
Altenmark
Zauchensee
Radstadt
Todas estas estaciones situadas en un amplio valle muy abierto por el que hay autopistas, carretera principal y ferrocarril estan todas ellas comunicadas con el skibus gratuito para esquiadores, pero no por remontes directamente al modo de los Tres Valles o les Portes du Soleil.
Yo estoy seguro de que podrían hacerlo, pero no quieren engendrar un mosntruo.
No obstante yo os aconsejo que si vais a recorrer esa zona, que da para más de una semana, os alquileis un coche para no complicaros la vida.
Mi entrada en esa zona, el primer día de los tres que le dediqué fué St Johann Alpendorf, que era la más próxima a la zona de donde provenía.
LO primero avisaros de que el pueblo de St. Johann im Pongau es el de referencia de la zona. Bastante feo, con muchas industrias y naves industriales tiene varias entradas y salidas y debeis evitarlo.
Pero incluso éste tiene su pequeña estación pues los austriacos no pierden ocasión de poner unos pocos remontes allí donde hay una pendiente.
Alpendorff más que un pueble es una estación de esquí con monumentales hoteles tipo alpino.
Allí tomas el Rodelbahn, un rápido telecabina que te deja en la cima de una montaña de nombre inescribible, que en realidad es una meseta donde se toman otros remontes hasta llegar a la cota máxima de esa estación que es el pico Hirschokogel a 1755 m.
A esa altura hay un par de pistas negras y varias rojas, que a partir de la meseta de nombre impronunciable se convierten en una larga pista roja, que llega directamente a Alpendorf.
Pero Alpendorf está unido a Wagrain, que se encuentra en dirección oeste, para lo cual tienes que bajar por la llamada Zeimesstrecke y tomar un rápido y cómodo telesila con capota que te deja en la cima del Sontagskogel a 1850 metros.
De allí tienes que bajar a otro valle subir otro sextiplaza rápido cómodo y encapotado y llegar a la cima del Grafenberg a 1702 metros.
Desde allí tienes la opcíón de bajar a Wagrain por una pista azul y otra roja.
Estas dos estaciones, bueno esta parte de Wagrain, porque esta estación tiene otra mitad conectada con Flachau, tiene vocación de horizontalidad, es decir que sus pistas no son perpendiculares al eje de la A10, sino que van paralelas a la misma, en un auténtico ejercicio de montaña rusa por las altas cumbres, aunque hablemos de alturas relativas, comparadas, p.e.con S. Nevada.
Como va por las cimas de las montañas, hay menos bosque que en otros sitios, pero yo tuve la suerte de tener un día radiente de sol y muy frío, por lo que no necesité ponerme el abrigo vegetal de los abundantes bosques de otras zonas.
Y este fué mi tercer día de esquí
saludos
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