Todo indicaba que este verano se podría olvidar la mala campaña de esquí de verano en el Passo dello Stelvio - Stilfser Joch. Las abundantes nevadas de la primavera permitian abrir con buenos espesores, e incluso con hasta un metro de nieve recién caída en pleno mes de julio. La respuesta además fue bastante buena, con colas en los remontes y miles de aficionados llegando durante el mes de junio y los primeros días de julio.
Lamentablemente a partir de la segunda quincena del mes de julio empezaron a aparecer altas temperaturas, por encima de lo habitual. Su persistencia ha mermado mucho las condiciones en pista, por lo que estos días en Passo dello Stelvio ya solo se puede esquiar si se tiene una reserva para entrenamiento.
La previsión que manejan los responsables de la estación de esquí de verano en el Passo dello Stelvio - Stilfser Joch, es de que las temperaturas no bajen estos días, por lo que casi con toda seguridad, cuando acabe el fin de semana pararán los remontes hasta nuevo aviso.
Esperaban cerrar el 5 de noviembre, cuando empiezan a caer las nevadas más intensas. La abundante nieve del invierno impide abrir los remontes hasta ya bien entrada la primavera.
El cierre a partir del domingo próximo, significará que por segundo año consecutivo tienen que pausar su temporada. El pasado verano pararon el 21 de julio. Este año será el 27 de agosto. Al menos es algo más de un mes más tarde.
Será también la tercera vez que se tiene que cerrar temporalmente en los casi 25 años que se ofrece esquí de verano sobre la meseta del Livrio-Cristallo, a 2.758 metros de altura. Eso si, las tres ocasiones son recientes, lo que pone en alerta a sus responsables. La primera fue en agosto de 2017, la segunda a finales de julio de 2022. La tercera será el próximo domingo.
De momento, y hasta que llegue ese día, se mantienen dos telesquís funcionando, pero para llegar a ellos se ha hacer en máquinas pisapistas porque no hay nieve suficiente en el trayecto. Son unos 60 deportistas que tenían reservas para entrenar. Las cifras eran de hasta 800 personas entre esquiadores y técnicos de clubes y equipos que se han tenido que buscar otros emplazamientos, o simplemente dejar los esquís en el trastero.
Según comenta Roberto Dinale, jefe de observación de los glaciares del Tirol del Sur del Servicio Hidrográfico Italiano, en las últimas 3 décadas solo ha habido dos años que han podido registrar un crecimiento positivo en los glaciares. El resto han presentado deshielo y reducción.
Pese a las dificultades, estas fotos de ayer en Stelvio reflejan el extraordinario trabajo que hace el personal de pistas.