En España tenemos la Y vasca para los trenes, la Y asturiana para coches y parece ser que también podríamos tener la Y aragonesa para esquiadores. La DGA junto a las estaciones de esquí de Astún y Candanchú han presentado su proyecto de conexión en el que se prevé una futura unión también con la población de Canfranc.
Como ya se adelantó hace unas semanas, la linea de remonte preferida es la de La Raqueta, y ésta es la que se ha presentado y sobre la que se va a trabajar. Permite ganar área esquiable (en un futuro) y por otra al dejar la puerta abierta a conectarse a Canfranc eliminando así tránsito de vehículos por la carretera de acceso.
El problema es que este proyecto tiene un coste mucho más elevado que los 8 millones de euros que se pidió a la Unión Europea a través de los Fondos Next Generation 21. Según cuenta El Heraldo la inversión necesaria es de 18 millones de euros, por lo que ahora toca seguir buscando más dinero. De momento la Diputación Provincial de Huesca ya aseguró que podía aportar 3 millones más.
Así que las miradas para los 7 millones que quedan están puestas en la DGA. Esta semana una delegación de Alcaldes del Valle de Aragón acudieron al Palacio de Pignatelli a presentar el proyecto de manera oficial, y se acordó que sea el Departamento de Remontes de Aramón quién valide los aspectos financieros y técnicos de este nuevo telecabina de Candanchú a Astún por La Raqueta.
En la reunión, que estuvo la Presidente de Aramón Marta Gastón y el Vicepresidente de la DGA Arturo Alaga, se acordó también buscar alguna otra alternativa para realizar la conexión.
La propuesta para unir las estaciones de esquí de Astún y Candanchú es instalar un telecabina de 3,2 kilómetros que partiría de la cota 1.500 metros de Candanchú, junto a la telesilla Reina Sofía y llegaría a la parte superior de La Raca de Astún a 2.300 de altitud. Sería un viaje que se podrá hacer en ambas direcciones.
El trazado haría un giro en La Raqueta con una estación intermedia a la que se conectaría en un futuro con otra cabina cuya terminal de salida se colocaría en explanada ferroviaria de Canfranc, formando una ‘Y’. Los esquiadores podrían bajar de La Raca a La Raqueta, como hacen ahora los que esquían fuera de pistas y de ahí cruzar la carretera con la telecabina y volver de nuevo con el mismo remonte.
La intención es hacer un pedido de 45 cabinas de 10 plazas, lo que sumado a los 8 minutos de recorrido, permitiría una capacidad de 2.400 esquiadores a la hora entre Astún y Candanchú (y viceversa).
Hay otra alternativa, que es unir ambas estaciones de esquí situando las terminales de salida (y(o llegada) en los aparcamientos. Pero entonces estamos ante un sistema que ya se cubre con los buses lanzadera y no aporta nada nuevo. Es decir, no da opción a poder ampliar el dominio esquiable ni conectarse en un futuro a Canfranc.
Además esta linea de telecabina pasaría junto a unos apartamentos. Un riesgo de que los propietarios demandaran y ganaran, como pasó en Baqueira Beret en su momento y le costó tres millones a la estación de esquí aranesa, según informa El Heraldo de Aragón.
En todo caso, ahora los técnicos de Aramón deben validar la propuesta por La Raqueta y empezar a moverse rápido, ya que los fondos europeos deben gastarse antes de 2024, y un remonte de este tipo requerirá de mucho trabajo burocrático, estudios medioambientales y sortear las futuras alegaciones ecologistas que se están preparando.