Y es que hoy en día más que una estación de esquí para pasar las vacaciones de invierno, se busca un destino. Es el caso de Astún-Candanchú/Jaca; Cerler/Benasque; Grandvalira/Andorra o Baqueira/Val d'Aran. Es el mismo caso de Francia, donde esto lo saben desde hace años. Allí han ido conectando sus pueblos a las pistas con teleféricos o telecabinas, como Cauterets, St. Lary, Peyragudes, Bagnéres de Luchon, Gourette, Les Angles y un largo etcétera.
En España en cambio es algo muy raro de ver. De hecho tradicionalmente las estaciones nunca pensaron en los pueblos, hasta el punto de que sus impulsores, al contrario de otros países como Suiza, las bautizaban con nombres que nada tenía que ver con las poblaciones cercanas. Cerler en 1971, fue el primer complejo invernal de nuestro país que tomó el nombre de un pueblo. Y Panticosa la primera que pensó en hacer llegar las instalaciones hasta las calles de la población.
Entrados ya en el siglo XX muchas estaciones han ido pensando en el modelo francés y conectarse a esas poblaciones que tanta vida les están dando a las pistas. Famosos son los intentos de Benasque de unirse con telecabina a Cerler. Sierra Nevada buscó también un teleférico a Granada, mientras que en Rialp esperan poder hacer lo mismo algún día a Port Ainé.
Baqueira no ha sido ajeno a esto y en este siglo varios han sido las propuestas para conectarse a Vielha. Las ventajas eran muchas, la más importante, la fuerte reducción del tráfico de la carretera de acceso. Pero el principal problema ha sido siempre la financiación. Un proyecto de esta magnitud cuesta una millonada que difícilmente puede ni acometer la estación sola, ni la población, Así que como ha pasado en otros casos, se ha optado por mejorar la conexión vial, ensanchando la carretera y asfaltándola regularmente.
Si hiciésemos un repaso a los proyectos que se plantearon y estudiaron en su momento, estos serían los más relevantes....
¡Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña!. Eso es lo que debieron pensar en 2004, cuando el entonces candidato socialista al Ayuntamiento de Vielha, propuso ampliar el dominio esquiable de Baqueira hacia las montañas de Salient y Varradòs.
Se trata de una zona libre de protección medioambiental, sin bosques, y donde se podrían crear pistas comerciales con relativa facilidad dado el tipo orografía de esas montañas. Se llegó a hacer un estudio con el objetivo de crear una estación de esquí que luego se debería conectar a la de Baqueira Beret. El proyecto contemplaba un telecabina de 5,5 kilómetros de longitud desde Vielha a esta nueva ampliación. También seis telesillas y dos cafeterías. Se estimó que se podría doblar la superficie esquiable de aquel momento, que era de unos 80 km de pistas.
Lamentablemente el coste era altísimo, unos 48 a 60 millones de euros. Si a eso le sumamos que en 2008 llegó una crisis galopante, tenemos que el resultado final acabó en algún cajón a la espera de tiempos mejores.
Otro de los proyectos que se plantearon en aquella época fue la construcción de un teleférico (o telecabina) desde la capital de la Val d'Aran a las pistas de esquí. La idea era extender un remonte a lo largo de la carretera C-28. El coste, de nuevo era altísimo, unos 48 millones de euros por entonces. Por eso se propuso que tuviese varias paradas coincidiendo con los pueblos por los que discurría a su paso.
Sus promotores argumentaron de nuevo los problemas de movilidad en el valle, especialmente en los fines de semana de invierno y periodos festivos de Navidad y Puente de la Inmaculada, que por entonces ya llevaban años siendo un quebradero de cabeza.
La longitud del remonte hubiera sido enorme, de entre 12 a 15 kilómetros, lo que encarecía mucho el coste, sobre todo por el tipo de remonte, un 3S. Se estimó en una cifra similar a la de la ampliación que se había propuesto un par de años antes: 48 millones de euros. Una inversión tan alta eran conscientes que ni Vielha ni Baqueira podrían llevarla a cabo, así que se propuso buscar inversores privados o que la administración pusiese la pasta. La idea acabó en un cajón junto a la de la ampliación de pistas...
De nuevo en 2004 y curiosamente de la mano del Ministerio de Ciencia y Tecnología, se financió un estudio para conectar Vielha con Baqueira mediante un funicular o un tren cremallera. La idea llegó desde este departamento del Gobierno de España del PP, porque al parecer el ministro que lideraba la cartera en aquel momento, Juan Costa, se quedó atrapado en un atasco en la C-28 camino de pista. Tal debió ser su cabreo, que logró apartar fondos de alguna manera para algo poco relacionado con su despacho.
En todo caso el entonces Síndic d'Aran, Carles Barrera, se mostró entusiasmado con una idea que se llevaba planeando desde hace años pero que no encontraba financiación para su estudio. Finalmente la oposición en el Ayuntamiento de Vielha encontró innecesario tamaña obra, ya que estimó que la linea de autobuses podría cubrir el servicio.
En todo caso hubiera sido de nuevo una obra carísima que además hubiera necesitado ocupar muchos terrenos públicos y privados para extender las vías. Imaginamos que ese estudio no debe dormir en el cajón junto a la ampliación y el telecabina, sino que se lanzó definitivamente.
Baqueira por su parte no está para ir descartando nada. Aunque parece que su prioridad ahora mismo es ir ampliando para acercarse al Pallars al mismo tiempo que renueva remontes, con una política medioambiental cada vez más restrictiva y los complicados trámites para poder crear una nueva pista donde sea, seguramente no se está para descartar nada y si fuera factible ampliar hacia Vielha y hay dinero para hacerlo, pues podría acabar haciéndose.
Con todo, la inversión para algo así, ya sea mediante pistas, remonte o un transporte por vía, es muy alta, así que es probable que nunca veamos la conexión por otra vía que no sea la carretera C-28, que sí se ha ido mejorando y acortando el trayecto. El Conselh de la Val d'Aran pone una linea de autobús para tratar de eliminar coches, y desde este invierno se ha logrado que se cierre el tránsito de camiones de gran tonelaje en las horas que más tráfico de esquiadores hay, es decir, los viernes por la tarde-noche y los domingos a una hora similar.
Son medidas que si bien no han conectado directamente Vielha con Baqueira con los esquís en los pies o en la mano, sí ha permitido acortar mucho el trayecto hasta las pistas, hoy apenas 15 minutos. Quizás por eso se está viendo no solo un repunte en la construcción de nueva vivienda en Vielha, sino también dirigida a un sector premium que antes buscaba comprar solo a pie de pistas.
Vielha con el paso de los años ha logrado convertirse en todo un pie de pistas con todo tipo de servicios, restauración y una gran oferta de alojamientos. Así lo han visto por ejemplo algunos impulsores, como los de Residencial Tenea, una promoción inmobiliaria de alto standing que se está levantando en el pleno casco antiguo de Vielha, junto al río Nere y el relax de su sonido que eso significa
A estos nuevos desarrollos se les exige una estética adaptada al entorno y a la climatología de la montaña. Pese a estar en Vielha, son residencias dirigidas a un cliente que sea asiduo esquiador. Por eso en sus viviendas, ya sean de 2, 3 o 4 habitaciones repartidas en 4 luminosos edificios, se han orientado de manera que tengan unas espectaculares vistas al valle, que es lo que se viene buscando cuando se quiere desconectar de la gran ciudad. Además, cuenta con garaje y trastero adaptado para guardar los esquís y almacenar cómodamente el material de montaña. Según informa el constructor, su estilo nórdico, cálido y confortable se combina con un sobresaliente nivel de calidad y eficiencia. Los edificios están recubiertos con una fachada de piedra, acristalamientos con alto grado de aislamiento y cubiertas de madera multicapa y pizarra.
Con un mínimo de 2 baños en cada apartamento, cuenta con acabados de alta calidad Porcelanosa, su gran aliado para asegurar la calidad del producto. El suelo es de parquet flotante multicapa, las ventanas de baja emisividad para garantizar el aislamiento térmico y sonoro, y las cocinas totalmente equipadas. Además de todo esto permiten personaliazar y adaptar cada estancia al gusto y necesidades del comprador.
En Blueproperty, empresa que ha colaborado con este artículo, comparten la pasión no solo con el esquí sino que también con la naturaleza y la montaña. Por este motivo aplican criterios de bajo coste de mantenimiento y alta sostenibilidad. Porque la montaña debemos cuidarla entre todos.
Vamos, podemos ver que según la promoción que hace el constructor de las calidades y los equipamientos, lo tienen casi como todo un pie de pistas, con la ventaja de estar en el corazón de una gran población de montaña. Si pasas por Vielha no te olvides de contactar con Blueproperty y pedir una visita a su piso piloto para que puedas comprobar el alto nivel de su producto.