Actualmente hay una buena capa de 72 centímetros sobre la pista, 10 de ellos recién caídos. Se esperan nuevas precipitaciones de nieve en los próximos días, por lo que ya no se teme por la falta de condiciones, sino porque todo esté inmaculado el día de la inauguración de la Copa del Mundo de esquí alpino, la primera de la era post-Hirscher.
El responsable de la organización de esta primera parada del 'circo blanco' ha asegurado que la parte del muro ya está lista, y que ahora van acercándose a la parte plana de la pista, donde todavía quedan algunos trabajos para dejarla perfecta para los participantes.
Para llegar a este punto en tan buenas condiciones a 20 días del 'día D' no solo se han encomendado a la madre naturaleza, sino que ya desde finales del invierno pasado almacenaron nieve en unos enormes depósitos. Es nieve que se fabricó expresamente para poder guardar y que ha tenido un nivel de conservación extraordinario. Gracias a ella se asegura todavía más, no solo la competición, sino que además los corredores y corredoras puedan entrenar sobre la pista de competición en los días previos.
La Copa del Mundo de esquí alpino de la temporada 2019-2020 se inaugurará el próximo 26 de octubre con un Gigante femenino. Al día siguiente 27, será el turno de los hombres.
La competición este año comienza huérfana, sin grandes nombres como Lindsey Vonn, Aksel Lund Svindal o Marcel Hirscher. Habrá que ver quienes son los nombres que se quedan con el papel de líderes de la 'nueva' Copa del Mundo.