Así pues, la estación andorrana encadena cuatro temporadas seguidas de crecimiento en número de visitantes con una dinámica moderadamente al alza de los mercados español, francés, británico y del norte de Europa, principalmente. Los mercados de proximidad como el español y el francés han presentado una evolución positiva en cuanto a la afluencia esta temporada. Por su parte, el cómputo global que se desprende del volumen de afluencia de los mercados internacionales también ha sido ascendente esta campaña de nieve con especial énfasis en los esquiadores provenientes del Reino Unido y de los países del norte de Europa.
En una campaña de invierno marcada por la irregularidad de las precipitaciones, los equipos de terreno han acumulado más de 1.000 horas de producción de nieve de cañón y hasta 25.700 horas de máquinas pisanieve, dos indicadores tangibles que realzan el ritmo de trabajo intenso y continuo por parte del personal técnico con el objetivo de garantizar las mejores condiciones en las pistas. No obstante, la distribución de los visitantes a lo largo de la temporada ha sido muy regular, con una media alta de esquiadores durante toda la campaña de nieve con picos especiales en los periodos vacacionales de la Purísima, Navidad y Semana Santa, y con unos meses de febrero y marzo con cifras superiores a los años precedentes.
Grandvalira ha invertido un total de 16 millones de euros destinados principalmente a optimizar y mejorar las experiencias de sus clientes y con el objetivo de seguir posicionándose como la estación de referencia del sur de Europa. Las inversiones que han recibido un retorno más destacable son las realizadas y orientadas al público familiar que han supuesto que este segmento de cliente aumente en 5 puntos porcentuales respecto al 2014-15.
El director comercial y de márketing de Grandvalira, Alfonso Torreño, ha valorado con satisfacción los resultados:
El calendario excepcional de citas deportivas de este año empezaba dedicado al mundo del freeride con la celebración del Freeride Junior World Championships y la primera edición de la célebre Skiers Cup, que por primera vez se ha organizado en una estación del sur de Europa. En el mes de febrero, Grandvalira vivió el momento álgido de esta temporada con la celebración por segunda vez de las pruebas de la Copa del Mundo de esquí Alpino Femenino, que llenó la pista Àliga de El Tarter con las mejores esquiadoras del mundo como Lindsay Vonn y Lara Gut. 10.000 personas vivieron la trepidante competición en directo y cerca de 300 voluntarios andorranos velaron por la buena organización de este evento que involucró a todo un país y ha servido para reforzar el posicionamiento de Grandvalira como referente mundial del esquí alpino.
La recta final de la temporada deportiva de la estación más grande del sur de Europa ha sido dedicada a dos de las disciplinas más espectaculares del esquí y el snowboard; el esquí de velocidad con la celebración de la Copa del Mundo de Kilómetro Lanzado y el freestyle con la 12º edición del Total Fight Masters of freestyle en la modalidad de snowboard y freeski.
El público también ha mostrado su reconocimiento a Grandvalira a través de dos prestigiosos premios recibidos esta temporada, como los World Ski Awards, considerados los óscars del sector del turismo de nieve,y el certificado de excelencia del portal Tripadvisor. En las redes sociales, Grandvalira también ha conseguido cifras record. Así lo ha recogido la consultoría de comunicación y bigdata Sibilare, que posiciona el dominio andorrano como la estación de los Pirineos que genera más comentarios en la red.