Hoy el día amaneció soleado, pero con un viento frío, lo cual no impidió disfrutar de un buen día de esquí. La estación no estaba muy repleta de gente, tan solo algunos autocares de colegios que estaban por la parte baja y muchos militares, estos aprendiendo a esquiar.
La nieve estaba genial. Se nota el gran trabajo que están haciendo por conservar la que tienen y fabricar durante toda la noche. LA estación está abierta casi el completo, las pistas muy bien pisadas y en muy buen estado de conservación.
Como ya dije ayer, me cogí unas clases con un monitor para ir cogiendo confianza con mi rodilla, pues la posición no la hacía bien, y no me veía bien ni me sentía a gusto en los esquís.
La verdad, es que con un rato ya me sentía mucho mejor, más a gusto y empezaba a disfrutar esquiando, me posicionaba mejor y la verdad, tan solo un par de veces sentí dolor.
Estuvimos en un principio probando y Ivan (que así se llama el monitor) me decía que iba muy bien, pero que debía empezar a olvidar mi rodilla y que me sintiera bien en los esquís, y después de algunas correcciones la cosa empezó a mejorar.
La verdad, un buen día, y para mi casi que inolvidable, pues después de tanto tiempo, me he dado cuenta que puedo volver a esquiar como antes y disfrutar de lo que más me gusta. Poco a poco iré mejorando, sé que aún me falta un largo camino por recorrer, pero las ganas y la ilusión no me han abandonado y pienso seguir esquiando y disfrutando de las pistas y de mi deporte favorito.
El peque estuvo en el Dreamland, pero ya me han dicho que mañana le pasan a curso seguramente, que he ido muy bien y que además se ve que le gusta y no tiene miedo. Me ha encantado que me dijeran eso, será amor de padre, pero lo cierto es que ya hace su cuñita y disfruta, que es lo más importante.
Mañana, si la batería de la cámara no se me descarga por el frío seguiré poniendo más fotos, está vez si es posible de los paisajes y pistas de esa maravillosa estación. Hoy Ivan quiso que yo fuera el protagonista
Página 3: Tercer día, 07/03/2.012
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