El pasado 2 de noviembre, a las puertas de una nueva temporada de esquí, se estrenó en Suiza el Zermatt-Furi, el primer teleférico totalmente automatizado con la tecnología AURO (Autonomous Ropeway Operation). El sistema de Doppelmayr-Garaventa permite funcionar sin ningún tipo de personal. Un sistema de cámaras y sensores velarán por la seguridad de los pasajeros y por el correcto funcionamiento del remonte.
El objetivo del AURO es doble. Por una parte seguir avanzando en la tecnología de los remontes del futuro. Por otra, prescindir del personal, algo que si bien podría parecer mal en casi cualquier sector industrial, en el caso de esquí, y especialmente en los Alpes, es algo que cada se hace más necesario.
Y es que uno de los problemas de Austria y Suiza cada invierno, es encontrar personal para sus estaciones de esquí. Esto obliga a subir más los sueldos en unos países donde los salarios ya son altos, y se acaba repercutiendo en el precio de los forfaits. Al menos esta es una de las excusas que ponen los operadores de remontes cada año cuando presentan las tarifas.
Por otra parte, se acabaron los problemas por despistes humanos. Un sistema de cámaras y sensores detecta si por ejemplo a alguien se le ha quedado una bota enganchada en la puerta, y automáticamente se para el remonte para que el pasajero pueda acomodarse. Un solo operario controla todo desde el centro de control «Ropeway Operation Center» (ROC). Nada que no hayamos visto en otros sistemas de transporte como el metro. Gerd Dür, gerente técnico de proyectos para AURO en Doppelmayr/Garaventa añade que
«El nivel de automatización de este sistema seguirá aumentando y creará interesantes conceptos de funcionamiento, especialmente para instalaciones con un número elevado de horas de servicio»
La primera pilona en forma de aro del Zermatt-Furi
Seguridad activa y pasiva
Este sistema, que se había implantado en dos telecabinas de las estaciones de esquí de Val Thorens, se logró introducir el año pasado en el nuevo telecabina Kumme de Zermatt tras la aprobación de la Oficina Federal de Transporte de Suiza (BAV). Ahora se implanta por primera vez en un gran remonte, un teleférico de 100 personas.
Para lograr un funcionamiento totalmente automatizado, no solo se ha tenido que diseñar un sistema de seguridad activa (cámaras, sensores, software, etc....) sino también en la seguridad pasiva.
Es decir, la entrada ha de ser fácil, y para ello el suelo de la cabina tiene que estar totalmente alineado con el de la propia plataforma de embarque, para que no haya escalones donde la gente pueda tropezar y de esta manera entrar más cómoamente. Además unos railes estabilizadores impiden que la cabina se mueva al entrar a las terminales de entrada y salida.
Los portaesquís son interiores (sistema TWISTIN), para evitar que el esquiador tenga que ir acertando en la ranura antes de entrar, y esperar a que otro los encastre para hacer lo mismo. Ahora todos acceden directamente a la cabina con el material en la mano, y una vez sentados lo colocan en los insertos interiores situados en el suelo.
El nuevo teleférico Zermatt-Furi por otra parte presenta una imagen espectacular, muy a lo grande, al estilo de la tendencia que busca estos años esta estación de esquí de Suiza, donde se quiere captar a un turista de alto poder adquisitivo que permita aumentar el ticket medio de gasto diario.
Así, el nuevo Zermatt-Furi es algo más que un teleférico de transporte de esquiadores o pasajeros, sino que se quiere convertir en uno de los atractivos para el turista que viene a disfrutar de la nieve sin esquiar, o el que llega en verano. Por eso lo primero que llama la atención al subirse a él, es el enorme aro en que se ha convertido la primera pilonas del remonte. El pasajero podrá encontrar de esta manera de forma rápida la ubicación del Matterhorn, justo en el centro del anillo por el que pasará posteriormente el teleférico.
Para más adelante, ya en verano, la experiencia podrá ser aún mayor cuando se monte la terraza en la azotea. Una escalera en el interior de la cabina permitirá salir al exterior, y 'melenas al viento' hacer este viaje a través del aro hasta llegar a la cima.
Características técnicas TPH-100 Zermatt-Furi
- Tipo: Teleférico va et vien
- Cota salida: 1646 metros
- Cota llegada: 1.871 metros
- Longitud: 1.715 metros
- Desnivel: 230 metros
- Pilonas: 3
- Velocidad: 10 m/s
- Duración viaje: 3 minutos 10 segundos
- Capacidad cabinas: 100 pasajeros
- Capacida transporte: 1.000 pers./h
- Constructor: Doppelmayr-Garaventa
- Inauguración: 2 de noviembre de 2023
Nuevo teleférico Zermatt-Furi con tecnología AURO de Doppelmayr-Garaventa