Cuando compras un forfait de esquí en Masella, el dinero se destina lógicamente a sufragar los gastos de mantenimiento, pagar al personal y hacer algunas inversiones. Pero hay una parte que se destina a ayudas escolares. De ello se encarga la Fundación Bosch i Aymerich, entidad sin ánimo de lucro que gestiona este complejo invernal.
La estación de esquí de Masella es una de las empresa muy comprometida con la comarca de la Cerdanya. De hecho, una de las razones por las que abren tan pronto, es según sus responsables, para poder ofrecer empleo más meses a quién hace temporada en la estación de esquí. Muchos son por ejemplo conductores de tractor o trabajadores del campo que en invierno se pasan a las pistas y la nieve.
Ese compromiso también se puede ver en las ayudas que hace a los escolares de la comarca, especialmente a los de los pequeños pueblos de Alp, Bagà, Fontanals, Das o Urús, todos ellos en la Cerdanya. Cada año la Fundación Bosch i Aymerich otorga una serie de becas de estudios a escolares de estos municipios por un total de 50.000 euros a repartir entre 25 alumnos.
También financia Semanas Blancas a escuelas de la Cerdanya como Bac de Cerdanya, Llums del Nord y el Institut Pere Borrell. Gracias a eso más de 600 alumnos pueden aprender a esquiar cada invierno en Masella. Se les paga el transporte a pistas, el alquiler del material, forfait y a mediodía la comida en el restaurante del Pla-1600.
También financia con 172.000 euros los cursos Mountain Medicine, Asociación para la Investigación y Asistencia Sanitaria en el Medio Natural, vinculada al Hospital Transfronterizo de Puigcerdà. Esta asociación fomenta la formación y la investigación a través de cursos, "symposiums", etc. en emergencias médicas en el medio natural. Son cursos liderados por el Dr. Enric Subirats, un referente internacional en medicina de montaña.
Estas son aportaciones que la Fundación Bosch i Aymerich hace anualmente, pero en otras ocasiones se financia otros proyectos puntuales como es el caso de la adecuación de la escuela Bac de Cerdanya. Es propiedad de cuatro ayuntamientos: Alp, Fontanals, Urús y Das. Se necesitaba reformar las aulas, sobre todo en este tipo de escuelas rurales que tanto ayudan a fijar población en la montaña.
La Fundación Bosch i Aymerich ha hecho una aportación de nada menos que 80.000 euros que servirán no solo para reformar las instalaciones de una escuela que tiene medio siglo de vida a sus espaldas, sino para adecuarlas a unas necesidades más adecuadas a la actualidad y que permitan a los profesores trabajar con mucha más comodidad.
En total son 11 aulas, donde todavía hay armarios de obra, tarimas de madera antigua o suelos de azulejo, un material no muy cálido para los inviernos escolares de montaña.
La directora de la escuela Bac de Cerdanya de Alp, Assumpta Villaró, ha explicado al Regio 7 que
Esto era un grueso de obras del proyecto muy costosa que estos cuatro pequeños ayuntamientos no podían asumir. Así que el equipo docente se reunió para plantear una petición de ayuda a la Fundación Bosch i Aymerich que finalmente ha sido aprobada.
Las obras comenzarán en breve. Sobre todo el suelo, que es de vital importancia y la parte más cara. Los Ayuntamientos por su parte se han comprometido a asumir el pintado de las paredes.
Ls obras darán una imagen más amable y cálida a las aulas
Acerca de la Fundación Privada Bosch Aymerich
La Fundación Privada Bosch Aymerich es una entidad sin ánimo de lucro que tiene como objetivo la creación, fomento y desarrollo de actividades de interés general, relacionadas con el mundo de las artes, la cultura, las ciencias, el deporte, la salud y específicamente la arquitectura y el urbanismo, dentro del territorio de Cataluña, con preferencia por las provincias de Barcelona y Girona.
Fue fundada en 1996 por el Sr. Josep Maria Bosch Aymerich, empresario, ingeniero y arquitecto que a su muerte el 16 de febrero de 2015 constituyó en Heredera Universal de todos sus bienes a la Fundación. La Fundación Privada Bosch Aymerich, tiene como objetivo prioritario continuar y potenciar el legado dejado por el Sr. Josep Maria Bosch Aymerich, entre ellos el de seguir potenciando las actividades empresariales con el fin de generar actividad económica en las poblaciones donde está presente, así como para la generación de beneficios que supongan el poder realizar más tareas de obra fundacional, objetivo principal de la Fundación.
Así, la Fundación Privada Bosch Aymerich es propietaria de la Estación de Esquí de Masella.
Es voluntad de la Fundación el seguir impulsando este negocio como motor de creación de puestos de trabajo y riqueza para la comarca de la Cerdanya, en general, y, en sus municipios en particular.
Paralelamente a las actividades empresariales la Fundación se continúa con la actividad fundacional con la convocatoria de becas destinada a los vecinos de los términos municipales de Alp, Das, Urús y Bagà. La Fundación lo hace en muestra de agradecimiento a sus habitantes y, también, por la preocupación de facilitar el acceso a estudios superiores en los jóvenes vecinos de estos municipios, dado que una buena formación es garantía de futuro para este territorio.
Y si la Fundación incide con la formación de los jóvenes se debe a los elevados gastos de los estudios superiores, que tienen un coste añadido por la distancia entre estos municipios y los centros de estudios superiores y las universidades del país.