Hace unos pocos años Rob Katz, por entonces todavía CEO de Vail Resorts, anunció que querían tratar de captar más clientes negros y de otros colectivos que no se solían ver por las pistas, como es el caso también de los esquiadores hispanos o asiáticos.
No se sabe que tipo de política han seguido para estos colectivos, pero parece que se empiezan a ver algunos cambios. Esto ha provocado que personas que no habían ido a esquiar nunca, cuando llegan a las estaciones tienen actuaciones poco convencionales.
Hace unos años un perfil de Instagram empezó a recopilar a estos novatos en el perfil Jerry of The Day. El éxito fue fulgurante, y fue replicado rápidamente en otros paises o de forma más local.
Podemos ver gente con el casco al revés, ropa de lo más variopinta, e incluso alguien que fue capaz de ponerse los esquís al revés. Es decir, con la puntera de las fijaciones en el talón de la bota.
A Rob Katz no le ha hecho gracia este fenómeno, y en una entrevista esta semana afirmó que Vail Resorts está en contra de que se viralicen burlas a estos novatos. Afirma que en general son esquiadores de comunidades locales los que se ríen de estos turistas.
Al parecer, lo que empezó como una recopilación de imágenes graciosas de esquiadores, se ha convertido en una burla a otros colectivos como los negros, judios o hispanos,
"Si eres una persona que probablemente ya esté entrando en un entorno en el que no ven a mucha gente como ellos, y no son buenos esquiadores, y se burlan de ellos, esto no es bueno para el trabajo que estamos haciendo."
Rob Katz critica también el NIMBYismo local, acrónimo inglés que significa «Not In My Back Yard» (no en mi patio trasero).
Con esto se refiese a esos pueblos de montaña donde hace falta vivienda asequible porque los residentes se las han ido vendiendo a precios muy caros a los turistas que buscaban una vivienda vacacional, y las nuevas promociones siguen esa tendencia.
Se da el caso por tanto, que muchas estaciones de esquí no encuentran personal, porque simplemente luego no tienen sitio para ir a dormir, o tienen que hacer viajes por carretera tan largos, que acaban quedándose a trabajar en otras zonas.
Los ciudadanos de esas poblaciones son conscientes del problema, está a favor de construir vivienda social, pero no al lado de su casa.
Los cascos también son motivo de burla