Y es que este grupo de viajeros prefiere evitar el 'contacto humano' a la hora de hacer los trámites burocráticos, ya sea a la hora de hacer la reserva en su ciudad, como cuando llega al destino. Por eso otra de las consecuencias es que cada vez más, prefieren reservar en un hotel que en plataformas como AirBnB donde han de ponerse de acuerdo con el anfitrión o incluso convivir con él durante su estancia vacacional.
Por eso los hoteles están cada vez más, sustituyendo el checking con un o una recepcionista, por máquinas situadas en los vestíbulos (igual que hace tiempo que hacen las aerolíneas), donde el cliente puede no solo confirmar su estancia, sino elegir la habitación que queda disponible en función de su reserva.
Otra de las razones por las que estos nuevos viajeros prefieren cada vez más el hotel a un apartamento de AirBnb, es la seguridadverificar el buen comportamiento de los anfitriones, este aviso todavía ha hecho ahuyentar a otros clientes que desconocían la situación.
De hecho AirBnB acaba de dar un paso para diversificar su área de negocio de alojamientos comprando HotelTonight.com. Se trata de un portal que comenzó comercializando habitaciones que habían quedado vacías a última hora, pero que ahora permite hacer reservas con 100 días de antelación. Es la antítesis de AirBnB, que basa su negocio en apartamentos y viviendas particulares. Hasta ahora sus pasos se habían encaminado en esta dirección, creando AirBnb Pus para apartamentos de lujo, y AirBnb dirigido a los viajes de negocios con espacios para reuniones y encuentros de equipos.
Algunos analistas afirman que la compra de HotelTonight también puede venir por las regulaciones que cada vez más, las ciudades están poniendo a este tipo de reserva de viviendas, antes destinadas al alquiler de larga duración, y ahora dirigidas a estancias cortas, eliminando miles de ofertas del mercado, lo que ha provocado un salvaje incremento del alquiler. Esta ampliación de su negocio hacia un alojamiento más tradicional podría ser una salvaguardia contra la amenaza de regulaciones que limitan los alquileres a corto plazo.
No obstante el modelo tradicional de negocio de AirBnb está asegurado durante bastantes años, de momento. El estudio Future of US Millennial Travel indica que un 52% de los encuestados, seguía usando regularmente u ocasionalmente los servicios de alquiler directo con un anfitrión, aunque estaba entre sus opciones menos preferidas para alojarse. De hecho para solo el 23% de ellos, este tipo de reserva era su principal elección. El hotel con todo tipo de servicios era su primera opción.
Eso si, el 68% de estos millennials encuestados pide que en el hotel haya un buen servicio de Wifi, y piscina (50%). Más del 57% de ellos afirman también que la seguridad o privacidad se ha colocado como un detalle de alta importancia, sobre todo tras los citados escándalos de cámaras escondidas en apartamentos particulares. Y si además la habitación es 'compatible con Instagram', mucho mejor.
Y esta tendencia hacia el hotel está teniendo pese a que Airbnb se ha convertido en una marca global presente en 191 países, con 41 millones de alojamientos y que ofrece diez veces más de ofertas que las cinco mayores cadenas de hoteles (Marriott International, Hilton Worldwide, InterContinental Hotels Group, AccorHotels Group y Wyndhams Worldwide) que tienen 3,9 millones de anuncios.
Finalmente, según el estudio, el millennial busca cada vez más, que alguien le configure el viaje. Por eso la agencia de viajes ha superado a Airbnb como método de reserva por un 24 a 23% respectivamente. Aunque eso sí, prefiere hacerlo on-line que ir a una agencia física.