Uno de ellos fue el telesilla que Laax montó hace tres años. Diseñado por Porsche, es de seis plazas, pero con asientos independientes. Es decir, que cada uno puede girarse para ir admirando el paisaje. Por su puesto el lujo no falta aquí, y está lleno de detalles. Cada silla está fabricada por Recaro, que las ha revestido de cuero, le ha colocado calefacción, y hasta un enchufe para recargar los teléfonos móviles. El conjunto se complementa con una capota panorámica para resguardar de las condiciones meteorológicas. Fue creado por el estudio de diseño que la empresa automovilística tiene a los pies de Zell-am-See, de donde han empezado a salir otros remontes como el telecabina de Schmitten, todo un alarde de tecnología donde no falta la calefacción, las pantallas de plasma, y hasta un bar por si se quiere organizar una original reunión de trabajo.
Parece que la estación suiza ha cogido afición por estos remontes tan caros, y para esta temporada ha encargado un telecabina a Pininfarina, el mismo estudio que diseña los Ferraris. Cada cabina cuenta con 10 plazas, sentadas por supuesto, y dotada de sistema de calefacción y acceso wifi. Se está acabando de montar estos días, y tendrá un recorrido de 3,3 kilómetros de largo, y sustituye al antiguo telesilla triplaza La Siala, del que tomará el mismo nombre. La base estará en Alp Sogn Martin y hará el recorrido en solo nueve minutos, 21 segundos mas que el anterior remonte, pero una longitud mayor, lo que permitirá abrir una nueva zona esquiable en esa zona.
El telecabina ha costado la friolera de 13,7 millones de euros, y contará con 63 cabinas y una capacidad de transporte de 1.800 pasajeros a la hora, aunque en una segunda fase se quieren añadir 7 cabinas más, incrementando la capacidad a los 2.000 personas/hora. Algo necesario para una estación que vende entorno al millón de días de esquí al año.