Tras la tregua que el sol dio a las estaciones los últimos días de febrero -coincidiendo con la parte final del puente de carnaval- y los primeros de marzo, la nieve y el mal tiempo vuelven a los enclaves de esquí de León y el Principado a partir de hoy y durante todo el fin de semana. A pesar de que las estaciones cuentan, después de las últimas e intensas nevadas, con los mejores espesores de la temporada y la mayor superficie esquiable en servicio, las condiciones meterológicas no acompañarán estos días para disfrutar del abundante manto.
San Isidro, con espesores máximos que alcanzan los 350 centímetros de nieve polvo, sigue a la cabeza de los enclaves de esquí alpino del país, sólo seguido de cerca por Sierra Nevada y el pirineo aragonés. Las precipitaciones del último fin de semana han permitido poner en servicio otros tres kilómetros más de pistas, con lo que el espacio alcanza ya su plena capacidad y está a punto, además, de batir el récord de esquiadores de la pasada temporada, que recibió 271.000, cuando aún restan algo menos de dos meses para que finalice la campaña actual.
Por lo que se refiere a Pajares, las nevadas también han incrementado su superficie esquiable y los espesores, con 17 kilómetros en servicio en los sectores de Valle del Sol, Tubo, Patines, Cueto Negro y Urbanización.
En la estación lacianiega, que sigue con todas sus pistas y remontes abiertos, las precipitaciones han dejado un manto de nieve que llega a los 220 centímetros, al igual que en El Morredero que este fin de semana abrirá prácticamente toda su espacio con nieve polvo de calidad.
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