La estación de esquí de Sierra Nevada inició ayer jueves su apertura progresiva tras dos días de cierre por las fuertes rachas de viento a causa del temporal. Después de una madrugada de bajas temperaturas en toda la provincia, especialmente en Víznar, que ha registrado la mínima de Andalucía con -4ºC, aunque esto no se ha traducido en incidencias destacadas en las carreteras.
Los técnicos de la estación de esquí granadina trabajaron ayer por la mañana en el desbloqueo de los remontes para la progresiva apertura de pistas, y en paralelo acondicionarán otras nuevas que entrarán en funcionamiento tras la nevada de entre 15 y 20 centímetros de espesor que dejó el temporal en la madrugada del pasado miércoles, según han detallado fuentes de Cetursa.
Los trabajos se concentrarán en la zona de Loma de Dílar, inédita esta temporada y que se quiere incorporar a la oferta esquiable, motivo por el que también los aparatos de producción de nieve se han activado concentrados en este punto aprovechando las bajas temperaturas en el macizo granadino, que la madrugada del miércoles ya registró -14,4ºC en las zonas más altas, a más de 2.800 metros de altura, según los registros de la Agencia Estatal de Meteorología.
En todo caso, será entre el viernes y el sábado, tras las labores de acondicionamiento, cuando se pueda conocer el impacto real de la pasada nevada en la oferta esquiable, según precisan desde Cetursa Sierra Nevada, que de momento hoy ha permitido abrir 23 kilómetros, aunque se espera que como mínimo alcance el medio centenar de kms para mañana sábado.