La actual situación política en Italia, movida como siempre, fue una de las razones para que presentara su dimisión Vincenzo Novari, Director Ejecutivo de Milán-Cortina d'Ampezzo 2026. Una mala noticia por los fuertes retrasos que prensenta la construcción de muchas instalaciones necesarias para estos próximos Juegos de Invierno que volverán a Europa tras varias ediciones consecutivas en Asia.
A todo esto se suma la delicada situación económica de estos Juegos de Invierno ante la falta de patrocinadores por culpa de la crisis financiera mundial y de que no haya un Director Ejecutivo.
Situaciones que ha llevado al presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, a reconocer los “desafíos” que enfrentan los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2026 en Milán y Cortina d’ Ampezzo.
Una visita de la comisión de coordinación del COI a las sedes de Milán y Cortina tuvo que ser aplazada tres meses, hasta diciembre, por las elecciones nacionales en Italia programadas para finales de este mes,
“Como siempre antes de unos Juegos Olímpicos, hay desafíos, en particular a la luz de este nuevo orden mundial emergente y la crisis financiera y económica.
Pero hemos superado algunos desafíos en los últimos años como son los Juegos Olímpicos celebrados en Tokio y Beijing en medio de la pandemia de coronavirus. Así que no estoy demasiado preocupado porque conocemos el entusiasmo, la eficiencia y la dedicación de nuestros amigos italianos”.
En una era de creciente sensibilidad sobre el costo de los Juegos Olímpicos y los gastos excesivos financiados por los contribuyentes, Bach señaló que una de las mejoras más caras de las instalaciones para 2026 no se incluirá en los presupuestos oficiales de Milano-Cortina.
Las autoridades italianas destinaron más de 80 millones de euros a la renovación de la histórica pista Eugenio Monti de bobsleigh en Cortina d Ampezzo para las competiciones de bobsleigh, luge y skeleton porque según Bach,
“este sería un proyecto turístico y deportivo que saldría adelante de todos modos e independientemente de los Juegos Olímpicos de Invierno”.
Bach también apoyó a las autoridades locales que esperan hasta después de las elecciones para nombrar un nuevo director general del comité organizador, tras la salida de Vincenzo Novari, una medida que ha paralizado la construcción y otros planes, como la búsqueda de patrocinadores. El Presidente del COI aseguró que
“El nuevo director ejecutivo debe contar con el apoyo del nuevo gobierno. No sería recomendable nombrar a un director general ahora mismo, a un par de (semanas) de las elecciones nacionales”.
Los de 2026 serán los Juegos Olímpicos más extendidos de la historia, con sedes repartidas en 22.000 kilómetros cuadrados en una vasta franja del norte de Italia, desde las regiones de Lombardía y Véneto hasta las provincias de Trento y Bolzano.
Los organizadores de 2026, programados del 6 al 22 de febrero de ese año, han seguido los planes del COI respecto a los Juegos Olímpicos modernos para reducir costos y evitar construir instalaciones que terminen siendo elefantes blancos financiados por los contribuyentes.