El gobierno islandés declaró a todo el Tirol como una zona de peligro y recomendó a sus ciudadanos no viajar a la zona.
Pocos después se descubrió que cientos de turistas se habían infectado en localidad austriaca mientras pasaban sus vacaciones de esquí. En lugar de retenerlos las autoridades de la zona permitió que se fueran a su casa, expandiendo el COVID-19 por varios países de Europa. Es así como Ischgl se convirtió en el principal focos de este virus en nuestro continente.
A finales de abril fueron realizadas pruebas de anticuerpos a un 80% de los cerca de 1.900 habitantes de esta pequeña localidad, conocida como la "Ibiza de los Alpes" por sus fiestas al margen de las pistas de esquí.
Los resultados mostraron que el 42% de los habitantes de Ischgl han desarrollado anticuerpos contra la Covid-19, el nivel más alto conocido hasta ahora en la población de un lugar determinado, informaron este jueves los médicos responsables del estudio.
Según la Universidad de Medicina de Innsbruck, que realizó este estudio de prevalencia, se usaron cuatro métodos diferentes para determinar la existencia de anticuerpos entre los cerca de 1.500 habitantes testados. El 42,2% de seroprevalencia "es la más alta publicada hasta ahora" , aseguró en rueda de prensa Dorothee von Laer, viróloga de la Universidad de Medicina de Innsbruck, quien añadió que
Además, entre los 200 menores de edad analizados, solo un 27% se infectó y desarrolló anticuerpos.
El brote de Ischgl ha causado gran malestar en varios países europeos, como Alemania, Noruega e Islandia, ante la lenta respuesta de las autoridades sanitarias tirolesas , incluso cuando ya tenían información de que muchos turistas estaban volviendo a sus países desde Tirol contagiados con el coronavirus.
Por eso, más de 5.000 personas de 40 países, relacionadas con el foco de infección de Ischgl, se han unido en una demanda colectiva contra las autoridades del Tirol austríaco.
A pesar del brote de Ischgl, Austria tiene una de las tasas de infección más bajas de Europa occidental. Introdujo medidas de confinamiento en todo el país, aplanando así su curva de infecciones, y comenzó a relajar las restricciones un mes después.