-Su procedencia está más relacionada con los 'skaters' que con el esquí,...
-Por supuesto. Partimos de la clásica tabla del monopatín, aunque la nieve resulta un factor fundamental para calificar este hobby como un deporte de riesgo
-¿Dónde sitúan su 'campamento base'?
-En la estación de Sierra de Béjar. A menos de una hora de viaje, resulta un sitio ideal para la práctica y el aprendizaje de esta modalidad y lugar de encuentro para nuestras comarcas, León, Madrid, incluso Portugal.
-La destreza sobre la tabla, ¿es fácil de transmitir a los principiantes?
-En Sierra de Béjar, el 60% van a aprender y hemos creado cursos propios. Un miembro del club está en Sierra Nevada para obtener el título de monitor. Hay que tener mucha paciencia para enseñar y, a la vez, para progresar individualmente.
-¿Cómo planifican la temporada?
-Programando todos los viajes y excursiones posibles, además de organizar eventos. Y no sólo en Sierra de Béjar. También formamos parte de comités para competiciones en Sierra Nevada, Madrid o León. Los Pirineos tampoco se nos escapan. El año pasado estuvimos 15 miembros del club en Cerler y en el próximo puente de la Constitución está prevista una visita a Andorra. Y todo, por 15 euros al año, el precio de alquiler de tablas, fijaciones y botas para un día.
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