La empresa que explota el complejo invernal ha tenido que modificar en el último momento y pese a tener los permisos pertinentes del Ayuntamiento de Naut Aran y de Urbanisme de la Generalitat el tramo de salida del telecabina ya que propietarios de apartamentos ubicados en el núcleo de Baqueira y que quedan situados muy cerca de donde debería pasar el remonte han llevado el proyecto al juez alegando que les resta intimidad.
El juez, mientras no tome una sentencia en firme, ha obligado a suspender de forma cautelar las obras en este tramo, por lo que el trayecto del telecabina desde el aparcamiento subterráneo hasta el enlace con el tramo 2, también en la cota 1.500, queda aparcado.
La estación espera tener despejado el tema de cara a la próxima temporada y poder concluir así el remonte teniendo el punto de salida tal y como estaba previsto desde el futuro párquing subterráneo.
El tramo de telecabina que se pondrá en marcha esta temporada tendrá un recorrido de poco más de un kilómetro y conducirá a los esquiadores desde la cota 1.500 a la 1.800.
El remonte estará formado por varias cabinas, cada una de ellas con capacidad para transportar a 8 personas.
La estación espera recibir las cabinas a finales de octubre o principios de noviembre, para luego instalarlas y probarlas dentro de todas las comprobaciones de seguridad.
La fabricación del telecabina ha sido encargada a una empresa austríaca especializada en estos cometidos y que es Doppelmayr.
Los propietarios de apartamentos de Baqueira que han llevado la construcción del telecabina al juez en primer lugar recurrieron la licencia de obras dada en su día por el Ayuntamiento de Naut Aran y posteriormente han presentado un recurso al conseller de Política Territorial contra la aprobación de Urbanisme a este proyecto.
Los vecinos también alegan de que el remonte sobrevola una zona verde.
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