El Principado apuesta por la gestión conjunta con León de Pajares, San Isidro, Leitariegos y Fuentes de Invierno, mientras la Diputación cree que se trata de un plan prematuro y «complejo».
La segunda estación de esquí del Principado estará operativa a finales del 2006, coincidiendo con el inicio de la temporada. Tras el largo invierno y los temporales de nieve, Asturias retoma las obras de este enclave invernal en el vecino concejo de Aller y acelera los trámites para la adjudicación de los principales trabajos que comenzarán a acometerse este verano: la construcción de las pistas con remontes y la ejecución del edificio de servicios múltiples.
El acceso a la estación -un ramal ya en obras de 500 metros a la derecha en dirección a León, justo antes de llegar a la Raya- unirá este área de esquí con la carretera AS-253. Permitirá llegar hasta la base de la estación y la zona de aparcamientos, también en ejecución.
La primera fase de Fuentes de Invierno estará conformada por 8,5 kilómetros de área esquiable: 12 pistas y cinco remontes. Uno de los diseñadores de este complejo de esquí de la empresa andorrana Semsa explica que Asturias y León deben resolver cuanto antes la fórmula de unión entre ambas estaciones, propuesta por estos creadores en su proyecto a través de un remonte en la zona de San Isidro conocida como Riopinos.
Ferrán Goya asegura que esta fórmula, unida al uso de un forfait común para que los esquiadores puedan utilizar los dos enclaves con la misma tarifa, se presenta como «la más racional para una misma cadena montañosa y un sistema conjunto». En este sentido, recuerda que este tipo de unión es frecuente en las estaciones de los Pirineos en Cataluña y Andorra y «ofrece grandes resultados», citando como ejemplo Soldeu y Pas de la Casa.
De todas formas, reconoce que existirán dificultades al tratarse de estaciones que se ubican en comunidades y ayuntamientos diferentes y son gestionadas por instituciones también diferentes (Diputación de León y Principado).
Aunque en principio estaban previstas catorce pistas, el proyecto definitivo de esta primera fase contempla dos menos para evitar en esa zona un impacto medioambiental. «A la hora de diseñar las pistas la orografía del lugar ha ayudado, cuenta con la morfología adecuada y ya presenta pistas naturales, donde ahora sólo deben cortarse arbustos y otras plantas», recalca Goya.
La segunda fase de Fuentes de Invierno, para la que todavía no hay fecha, prevé otros diez kilómetros de área esquiable y la instalación del sistema de innivación artificial. «El apoyo de la nieve artificial resultará fundamental para garantizar algunas épocas de cada temporada. Fuentes de Invierno no está enclavada en una cota absurda -entre los 1.600 y 1.949 metros de altitud-, así que la nieve no faltará».
El presupuesto de la segunda estación asturiana en esta primera fase se acerca a los 11 millones de euros procedentes del Plan Complementario para la Reactivación de las Cuencas Mineras. «No sólo es viable, sino también obligatorio que Fuentes de Invierno y San Isidro se unan a través de Riopinos» (a las dos estaciones tan solo las separan 10 metros). El director general de Deportes del Principado recuerda que la ampliación de la red eléctrica para garantizar el suministro a la estación leonesa también alimentará al enclave asturiano. Además, aboga por promociones turísticas conjuntas de ambos espacios.
«Es de sentido común esta unión, que será muy rentable, con forfaits comunes y en el futuro una gestión conjunta», asegura Daniel Gutiérrez Granda, quien incluso va más allá y plantea que a medio o largo plazo todas las estaciones de esquí de León y Asturias -Pajares, San Isidro, Leitariegos y Fuentes de Invierno- tendrán que estar gestionadas por una misma empresa.
«Tenemos que trabajar conjuntamente y ahora se nos presenta una oportunidad única con esta negociación», recalca. El responsable del área de Deportes en el Principado explica que «no tiene sentido que estaciones que están tan próximas y en el mismo entorno vayan por libre».
Respecto a la segunda fase de Fuentes de Invierno, Granda avanzó que de momento aguardarán a conocer la demanda que existe en las pistas de la primera fase para decidir la ampliación, «aunque estoy seguro que será un éxito».
Hoteles y viviendas, con lupa
El desarrollo residencial de la segunda estación de esquí del Principado dependerá de los informes medioambientales, aunque el director general de Deportes recuerda que son «respetuosos con la naturaleza y en el proyecto de este enclave de esquí hemos sido muy rigurosos y serios». No obstante, afirmó que habrá algún hotel «siempre integrado con el entorno; desde luego no propiciaremos tal volumen de construcciones como en San Isidro».
Por su parte, el presidente de la Diputación, mostró una vez más «la absoluta colaboración sin reservas con el Principado» en el proyecto del enlace entre Fuentes de Invierno y San Isidro (a las que tan solo separan 10 metros). En cuanto a la gestión conjunta, García-Prieto recuerda que las estaciones se encuentran en dos comunidades diferentes, «aunque el esfuerzo de colaboración está garantizado».
De todas formas, manifestó que precisa conocer más el proyecto «para contemplar todas las posibilidades técnicas y de gestión, que deben matizarse con el tiempo de acuerdo a la dimensión del plan». La promoción turística conjunta, sin embargo, le parece «muy bien» al presidente y piensa que justamente debe trabajarse en esta línea.
Cree, respecto a la idea del Principado de fusionar todas las estaciones, que se trata de un asunto «de mucha complejidad, sobre todo, cuando se desarrolle San Glorio; considero que es una idea prematura».
Aller reclama un desarrollo urbanístico como en el área vecina
Desde el concejo asturiano de Aller tienen claro que no dejarán pasar la oportunidad de contar con una estación de esquí que conlleve un desarrollo urbanístico similar al que ahora arranca en San Isidro. En este sentido, el alcalde, Gabriel Pérez Villalta, subraya que debe de ser el Principado quien permita este desarrollo, ya que las competencias urbanísticas corresponden a esta institución, que también se encargará de la gestión del enclave, una vez que Aller ya le ha cedido la propiedad, garantizada mientras se mantenga el uso previsto.
Villalta señala como imprescindible la construcción de hoteles y viviendas en el área de Fuentes de Invierno. «Los apartamentos no pueden venderse sólo en San Isidro, nosotros también queremos participar del impulso del esquí».
Recuerda, además, que el concejo aprobó el pasado año un nuevo PGOU para poner a disposición suelo destinado a 1.500 viviendas. El alcalde cree que casi todas se concentrarán en los pueblos base del concejo: Felechosa, El Pino y La Pola.
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