Por su parte, La Pinilla (Cerezo de Arriba, Segovia) esperará hasta el 5 de diciembre para abrir sus puertas y tanto La Lunada, en Espinosa de los Monteros (Burgos) como El Morredero, en Ponferrada (León), aún carecen de fecha para iniciar la temporada y dependen de las condiciones meteorológicas.
La estación de esquí alpino más grande de la Comunidad es la de San Isidro, en el norte de León, que registra asimismo la mayor afluencia de deportistas, unos 250.000 por temporada. Es la única que cuenta con pistas negras, las de mayor dificultad para los esquiadores más expertos. En conjunto, dispone de 23 pistas de diferentes niveles, 12 remontes y 23,8 kilómetros de extensión esquiable.
En cuanto a las principales novedades que presenta San Isidro este año, destaca la adquisición de seis productores de nieve, una moto y una cuña quitanieves, así como el inicio de la construcción de un edificio de servicios múltiples y el acondicionamiento de varias de las pistas, entre otras mejoras.
También en León, Leitariegos, en el municipio de Villablino, ofrece cuatro pistas y dos remontes a lo largo de 2,75 kilómetros de extensión, por los que pasaron el pasado invierno más de 11.000 personas.
La Covatilla, por su parte, posibilita a los esquiadores que elijan la comarca de Béjar para practicar este deporte tres nuevas pistas, que amplían el recorrido esquiable hasta los 8,37 kilómetros en un total de nueve pistas balizadas, a las que se accede a través de cuatro remontes de diferentes tipos. Con estas actuaciones, los responsables de la estación bejarana pretenden incrementar la cifra de 27.000 visitantes que recibieron en la pasada temporada.
La Pinilla, camino de la ISO 2001
A partir del 5 de diciembre, se sumarán a estas estaciones los 20 kilómetros esquiables de La Pinilla, ubicada en la localidad segoviana de Cerezo de Arriba, que presenta una oferta de 24 pistas -la mitad de ellas de dificultad alta- y 13 remontes.
La principal novedad de esta estación, que vendió la temporada pasada 50.000 forfaits, es la apertura de las instalaciones para la práctica del snowboard.
Por otro lado, según indicó el director de la estación, Ramón Valle Palacios, han iniciado el proceso "para obtener la certificación de calidad medio ambiental ISO 2001 en el total de los servicios de la instalación". Valle Palacios explicó que "es un proceso muy largo y costoso" por lo que obtener la norma en el año 2006 "sería un gran éxito". En este mismo sentido, el director de La Pinilla aseguró que para 2004 pretenden conseguir la "Q" que concede el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), que señala la calidad de diferentes servicios turísticos y que "es relativamente fácil de obtener", según Valle Palacios.
Hasta la fecha, ninguna estación invernal de Castilla y León cuenta con una certificación de calidad de este tipo.
Futuros proyectos
Entre los proyectos que pretenden ampliar el número de estaciones invernales de la Comunidad, el más avanzado es el de San Glorio, situado en el vértice oriental de la provincia leonesa en las localidades de Burón y Boca de Huérgano. La nueva estación pretende extenderse a lo largo de 30 a 40 kilómetros esquiables y se situará en una cota superior a los 2.000 metros de altitud.
El grupo empresarial Tres Provincias invertirá en este proyecto 72 millones de euros, según aseguró el presidente de la Diputación de León, Javier García-Prieto. "El proyecto es viable y puede garantizar el desarrollo de la Montaña Oriental Leonesa", destacó el presidente de la institución provincial.
En el otro punto del mapa castellano y leonés, el Ayuntamiento de Soria ampliará para la próxima temporada 2004-2005 las pistas de esquí alpino del actual Punto de Nieve Santa Inés, situado en Vinuesa, para convertir este enclave "en una de las estaciones de referencia de la zona centro de España", según declaró el concejal de Medio Ambiente de Soria, Luis Miguel Bonilla.
En otro orden de cosas, la Asociación de Empresas de Turismo Rural de Castilla y León (Atacyl) presentará a la Dirección General de Turismo de la Junta en un breve plazo varias propuestas para la creación de una "red de puntos blancos" en la Comunidad, indicó Miguel Ángel Vidal, presidente de la Asociación.
"Se trataría de crear un circuito de esquí nórdico o de fondo que permitiera a su vez desarrollar otras actividades, como el "snowboard" o el paseo con raquetas, en zonas como la Sierra de Gredos, la Montaña Palentina y otros enclaves de León, Segovia y Soria", explicó Miguel Ángel Vidal.
"No existe ningún proyecto escrito, pero son iniciativas que no requerirían una inversión muy grande, ya que con unos 120.000 euros se podría poner en marcha una estación para esquí de fondo, que no exige tantas instalaciones como las de esquí alpino", añadió. De cualquier manera, el presidente de Atacyl señaló que "no sería un salto al vacío porque cada vez hay más aficionados a estos deportes de invierno" y que "se implantarían en lugares donde existan empresas de turismo activo que pudieran encargarse de la gestión de las estaciones".
Pendientes del cielo
Por su parte, los responsables de otras dos estaciones invernales de la Comunidad se encuentran con la atención fija en el cielo y en las previsiones meteorológicas, puesto que dependen de la nieve que caiga estos días sobre las cotas más altas de la región para poder colgar el cartel de abierto y dar inicio a la temporada de esquí 2003-2004.
Éste es el caso de La Lunada, ubicada en Espinosa de los Monteros (Burgos), en la frontera con Cantabria y donde la nieve aún no cubre lo suficiente los montes de Valnera. A pesar de su tamaño modesto (1,6 kilómetros), dispone de siete pistas, cuatro de ellas de dificultad alta por sus acentuadas pendientes.
Tampoco en la estación de El Morredero de Ponferrada (León) tienen una fecha fijada para inaugurar la temporada, aunque las instalaciones están dispuestas para abrir al público en cuanto el cielo lo permita. Cuenta con seis pistas, dos verdes y cuatro azules, que se extienden a lo largo de 3,5 kilómetros y a las que se accede por tres remontes. Los responsables de la estación calculan que pueden acoger a unos 1.500 esquiadores cada fin de semana, únicos días junto a los festivos en los que abre la estación.
Existen otras cumbres de la región que permiten la práctica del esquí nórdico y otros deportes de invierno a pequeña escala, aunque no disponen de instalaciones para esta finalidad, por lo que sus visitantes son ante todo aficionados. Entre ellas, se sitúa Valle del Sol, en Pineda de la Sierra (Burgos), que no suele abrir por falta de nieve aunque es visitable con fines turísticos.
En la provincia de Ávila, las áreas de actividad de Navalperal de Tormes y Zapardiel de la Ribera, y en León, las zonas de Riaño y San Emiliano permiten realizar esquí de fondo. Asimismo, existió un anteproyecto para construir en Llanaves de la Reina (León) una estación invernal llamada "Esla 2002".
Por su parte, en Palencia se ubica el área de actividad de Brañosera La Collada, una antigua estación prácticamente abandonada que permite actualmente practicar esquí nórdico. También se pueden realizar deportes invernales en el Puerto de Piqueras, que pertenece al municipio La Poveda de Soria.
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