Esta historia se forjó hace ya varios meses cuándo Juanjo (Ratón), uno de los ilustres de Nevasport me dijo que cuándo hiciera un tour por el Pirineo, vendría verme a mi estación, Port del Comte.
Resulta que tras algunos reportajes de divertidas jornadas en dicha estación, aquí un pequeño resumen, varios ilustres también me comentaron que algún día les gustaría venir, dichos personajes eran Danito, Lu_k, Carlos y Ardi (Álvaro).
Pues con esta premisa y tras contactar con ellos, decidimos que haríamos un encuentro, y si alguien más se quería apuntar bienvenido sería.
Era una kdd muy informal, más bien un encuentro de varios amigos, esquiar,reír y amenizarlo con una barbacoa en el jardín a la luz de la luna.
Tras algunas animadas conversaciones decidimos que lo pondríamos en el foro de kedadas para ver si se quería apuntar alguien más.
Por sorpresa mía, de golpe y porrazo la gente se animaba y se apuntaban a este encuentro, la cosa se estaba desmadrando y no cabíamos todos en casa!!!
¿Qué podía hacer? Pues ni corto ni perezoso, me puse en contacto con el Ayuntamiento para ver si me alquilaban el local social y, tras varias gestiones, recibía el ok.
Comuniqué inmediatamente esta buena noticia y en un santiamén nos plantábamos más de 40 personas que se querían unir a lo que en principio era una pequeña fiesta. Por unos momentos me vi desbordado, pero tanto los ayudantes de liantes como mi Santa, Txell, me dijeron:
- Vamos al lío que nos lo pasaremos en grande!!!
Así nacía la kdd Ferran&Pow en Port del Comte.
La fecha se acercaba y los preparativos no eran pocos, excel por un lado, papel y bolígrafo por otro, calculadora en mano y cerebro a mil.
Y llegó el momento de la verdad, 15 de febrero, gente de toda la Península recorría centenares de kilómetros para llegar a Solsona (dónde muchos pasarían las noches), y a Navès (dónde está mi casa y celebraríamos la gran bbq).
Primero recibíamos a María (A mi bola) y a su amiga sevillana Anmar, que hacía rato que habían llegado a Solsona y se acercaron a casa para guardar unos deliciosos postres preparados por María.
Luego llegaron Nico52 (Nico) y Panaca51 (Paco) que nos pasaron a saludar antes de llegar a Solsona, y al ratito, aparecía el Gran Ratón (Juanjo para los amigos, jajaja) con su famosa jamoneta.
Nos prepararía unos costillares con salsa barbacoa casera, los cuáles tenía que poner a maserar el mismo viernes, y mientras yo me lo miraba, Txell preparaba todo el tinglao.
Al rato llegó Ardi desde Cuenca y más tarde la grupeta de Madrid, Carlos, Lu_k y Danito, los cuáles se quedaban a dormir en casa. Allí ya haríamos la primera cena de la cuál nos habla magníficamente Carlos en su bonito reportaje.
Sábado por la mañana cuesta levantarse, estos madrileños son muy peligrosos jajaja, desayunamos y nos dirigimos para la estación.
Son momentos en los que hay muchos sentimientos, nervios, estrés, alegría, emoción. Momentos de encuentros con amigos, de reunirnos todos y entregar las acreditaciones que previamente hizo Txell.
Pero antes de empezar a deslizar todos juntos, primero nos dirigíamos a las taquillas de los chicos de la escuela de esquí La Bòfia, que amable y desinteresadamente nos las prestaron para dejar allí los esquís Blueberry que Marcos nos había dejado para quién los quisiera probar. Muchísimas gracias a ellos por su amabilidad!!!
Era el momento de empezar a deslizar y no sabía cómo lo haríamos, éramos demasiados para ir todos juntos y aunque todos con mucho nivel, había los que preferían ir más tranquilos y los que siempre tienen prisa, jajaja.
Llegamos a lo alto de la silla el Querol y nos reunimos casi todos, parece que nos esperamos. Empezamos a deslizar para calentar, veo que nos vamos esperando y pienso... menuda piña, pero seguro que dura poco.
Se van sucediendo las bajadas y cada vez hay menos slow-ski cómo dicen algunos. El ritmo se acelera pero seguimos casi todos, casi 40 personas deslizando a la vez!!!
Verlo es algo alucinante, tenemos la estación casi para nosotros (hay poca gente en pistas) pero bajamos juntos un grupazo cuál estrella fugaz.
En estas dos fotos vemos a la avanzadilla del grupo y a los dos elegantísimos telemarkeros que en lugar de esquiar parecía que salían del ballet ruso.
Las bajadas iban sucediendo sin parar hasta que en una sesión de fotos realizada por el impresionante fotógrafo Fernando, integrante de mis grandes amigos de SkiPowderLovers, tuvimos el percance del fin de semana, Raúl, mi inseparable compañero de aventuras tras un mal apoyo se rompía la tibia, ésta va por ti Raúl.
Tras un buen rato de incertidumbre, nervios y pena, seguimos esquiando y nos dirigimos hacia la joya de la estación, Estivella.
Allí pudimos disfrutar de las magníficas palas rojas y negras sin pisar cubiertas solamente con nieve natural, y los muchos que no la conocían, se encontraron con el famoso caballo loco, el mítico arrastre de Els Carbassers.
Dicen que una imagen vale más que mil palabras...
No digo el nombre para preservar su intimidad, jajajaja.
Aquí tenemos al pequeño "gran" Mauro, hijo de Mikele y Laura, que parece que todavía es muy joven para pensar en descendencia, jajaja.
Allí en Estivella hicimos varias rondas, hasta que las piernas empezaron a notar las bajadas acumuladas y tras unos momentos de deliberación del grupo, decidimos que era la hora de la vuelta al centro de la estación.
Así que tras la toma de decisión, todos para abajo al encuentro de los desperdigados, que Ratón nos quería reunir en su famosa jamoneta antes de dirigirnos a la Gran Cena.
Aunque antes de llegar, algunos quisieron probar el famoso agro-ski Nevasportiano, jajajaja (estos Rossignol tienen suelas de acero, ni un rasguño!!!)
Cuándo estábamos bajando las escaleras hacia dónde estaba aparcada la jamoneta, vimos una de las imágenes más buscadas...
Allí pasamos un buen rato, degustando jamón, sidra y demás bebidas, al mismo tiempo que lo amenizábamos con música tirolesa a cargo de Ratón DJ, jajaja.
Aunque la verdad que ese rato fue corto, ya que nos tocaba ir para preparar la gran Barbacoa que nos alimentaría después de una épica jornada.
Y hasta aquí puedo leer, espero que me perdonéis, pero la cena y el día después vendrán en el siguiente capítulo...
Aquí podéis acceder a la segunda parte del reportaje.
Cómo bien sabéis, si queréis saber más...