Nuestro compañero Nes ha elaborado junto con su colega Laura Rodríguez Fernández un patrón de niveles de esquí y snowboard, asistidos por la Dirección general de deportes del Principado de Asturias. El asunto ha creado cierta polémica, creo que debida a no haber entendido - o explicado- bien en qué consisten estos diplomas.
Siempre ha existido en las escuelas estos certificados informales que se entregaba a los alumnos gratuitamente, con el sencillo propósito de que conocieran su nivel de esquí. Los alumnos han reaccionado habitualmente a estos diplomas y medallas de las formas más diversas, desde la ilusión de los niños hasta la indiferencia o la chanza de los adolescentes. De cualquier modo siempre ha sido una confirmación de la progresión – o lo contrario - llevada a cabo durante las clases y una forma de tener información externa, más o menos objetiva, del propio nivel.
Creo que la voluntad de este trabajo de nuestro compañero no es restringir las libertades de nadie ni juzgar frívolamente a ningún esquiador, ni estabular a ninguna persona según sus características propias. Es mucho más sencillo; esta iniciativa es una reacción a la tremenda dispersión de conceptos y terminología que hay en la enseñanza del esquí en España, y sólo trata de proponer unos puntos en los que seguramente toda la comunidad de esquiadores estaríamos de acuerdo, sobre todo para facilitar el trabajo en las escuelas.
Además, aporta la novedad de no limitarse a señalar un nivel escuetamente, sino a describir las capacidades y los escenarios de ese nivel de habilidad. Creo que esta información puede ser de utilidad y servir a la vez para motivar, conocer las fortalezas y las debilidade propias, saber en qué dirección se puede progresar, etc. En fin, estoy seguro de que nuestros compañeros sabrán explicar todo esto mucho mejor que yo, para aclarar los malos entendidos que la noticia de ayer haya podido causar
¡Buenas huellas!
Carolo 2014