Alto Campoo echó ayer la persiana con un balance de 99.186 esquiadores, 15.000 más que en el año pasado, y 856 pases de temporada, y lo celebró con una barbacoa en el snowpark. «Nuestro objetivo es superar los 100.000 usuarios, pero el dato de esta temporada es bueno porque mejora sustancialmente los anteriores», sostiene el director de la estación David Aja, satisfecho, aunque los resultados económicos, todavía provisionales, «son similares a los de la temporada anterior».
La media diaria del espacio blanco alcanzó los 870 esquiadores en una campaña marcada por la inestabilidad: primero por el retraso en la apertura de la estación ante la falta de nieve, y, posteriormente, por los problemas causados por la cadena de temporales sufrida en la montaña cántabra durante todo el mes de febrero. La temporada no dio comienzo hasta el 16 de diciembre con lo que «se perdió» el Puente de la Constitución. Después, según explica Aja, la primera semana de enero fue buena pero llegó febrero y desequilibró la campaña. La ya conocida como ‘la nevadona’ impidió a los campurrianos abrir las instalaciones durante diez días consecutivos ante el colapso que provocaron las intensas precipitaciones blancas. Además, se desaprovecharon muchos días «por el viento y la niebla», añade otro empleado de la estación.
La Consejería de Turismo, que preside Eduardo Arasti, aprovechó el cierre de temporada para hacer balance de toda la legislatura. «El resultado es positivo», porque se ha pasado de 71 días esquiables en 2011 a los 114 de esta campaña, un 60% más. Y de 73.739 esquiadores se ha llegado a los casi 100.000 de esta temporada, «un 34% más de usuarios que al inicio de la legislatura». Los pases de temporada crecieron en estos cuatro años un 8%, al pasar de 791 en 2011 a 856.
Pero los buenos datos de esta legislatura distan mucho de aquellos balances de 2008 y 2009, cuando la estación superaba con creces los cien mil usuarios. En 2008 Alto Campoo permaneció abierta seis meses y recibió 164.000 esquiadores. Al año siguiente, descendió a 130.000, pero la temporada de 2010 fue desastrosa. Apenas hubo 40.000 esquiadores y sólo se abrió 30 días.
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