Uno de los muy fans de la bota es la olímpica Emily Cook, quien en 2002, tan solo dos semanas después de clasificarse para los Juegos de Salt Lake City, se rompió las dos piernas en el aterrizaje de un salto. Después de tres años de terapia física logró competir en Turín 2006, pero seguía teniendo mucho dolor. Finalmente este verano le presentaron las Full Tilt, y su dolor se calmó, lo que le permitió hacer salto con mas seguridad en los entrenamientos.
Una década de éxitos
Para la mayoría de esquiadores esta bota le suena a nueva, pero tras de si tiene toda una década plagada de éxitos, que la llevó a ganar podios en competiciones internacionales, pero sobretodo una gran aceptación a nivel mundial, hasta tal punto, que hubo momentos en que la producción no daba a basto a sacar la demanda del mercado.
"Chicos, ustedes deben decidir, ¿quieren esto o esto?".
A partir de entonces la Raichlie comenzó a tener una gran aceptación, hasta que la marca la compra Peter Werhan en 1983, un alemán que la lleva al éxito sublime, con mas ventas de lo que se podía producir. Fue sin duda la mejor época de la bota, pero lamentablemente Peter falleció en un accidente de automoción, y aunque su mujer quiso llevar las riendas, ya nunca fue lo mismo hasta que en 1996 la empresa se declaró en bancarota.
La marca pasa a manos de del suizo Dr. Grosnick, especialista en comprar empresas para reflotarlas, que adquiere la marca en 1999. Poco después compró Kneissel Skis, para fundir en una sola marca esquís y botas, y le hizo algunas mejoras, pero los esquiadores seguían buscando la original. Con la aparición de Internet, eBay se llenaba de gente pidiendo repuestos de aquella bota original de tres piezas. Finalmente en 2003, casi 25 años despues de sus primer lanzamiento, Full Tilt, la filial de K2, decide comprar los moldes y sacarla de nuevo al mercado.