Buscando a los Reyes Magos por Valdezcaray...
Avanzamos a buen paso y a lo lejos vemos el cerro Turraguas, antes del cual dejaremos la pista para ganar altitud con más rapidez. Distinguimos varios tableros que suben andando, abriendo huella. La gente tiene ganas de esquí, y no le importa hacer esfuerzos para disfrutar aunque sea de una bajadita.
Ya en el valle del Usaya el paisaje nos hace dudar de si estamos en la Rioja o en Canadá. los tableros siguen por delante, aunque pronto les dejaremos atrás, había mucha nieve para andar con comodidad sin esquíes o raquetas.
Ignacio y yo, disfrutando de la fresca mañana. El cielo estaba cubierto, pero las nubes estaban altas (en el San Lorenzo, para variar…) y la visibilidad fue alta en todo momento.
Vistas de la Demanda.
Pasamos al lado de árboles completamente cubiertos de nieve, al estilo de Japón o Canadá, y no podemos resistirnos a la foto del postureo…
Antes de llegar a pistas, nada más pasar el Cerro Colocobia, nos desviamos a la izquierda, para comprobar que tal está la zona de Las Hayas. Tiene una pinta estupenda, así que fuera focas, dentro ropa y al lío.
Toda la ladera con nieve polvo ligeramente compactada, muy estable y sin tocar.
Dejamos la firma, por supuesto.
Felicidad…
Terminamos la bajada esquiando entre matojos (un clásico en Valdezcaray) y sin más incidencias nos dirigimos al coche por El Camino. El atajo que hay (popularmente conocido como el cortafuegos) no tenía nieve suficiente, así que completamos el descenso por la pista. Cuando llegamos ya había bastante animación de trineos y paseantes. Recogimos todo y nos fuimos a reponer fuerzas a Berceo, al restaurante El Mirador, donde mientras comíamos nos deleitamos con estas vistas
De la comida no tengo fotos, entre el hambre que había y lo bueno que estaba todo no hubo ocasión de sacar la cámara
Ahora sólo nos queda esperar a ver qué nos dejan Filomena y su prima. A ver si el domingo se puede rascar algo más😊