Y así establecimos como centro de operaciones el pequeño pueblo de Termignon, que es pie de pista de Val Cenis. Un pueblo con poco pero más que suficiente comercio.
Val Cenis Vanoise
El primer día accedimos desde Termignon , que es la parte más alejada de la estación (pero nada desdeñable con sus dos TSF4 Gimar Montaz Mautino y los dos arrastres de la parte alta que cataríamos a la vuelta.
Desde ahí la bajada a Lanslebourg se puede hacer por pista pero permiten hacerlo en el TSD6 Turra. Ya llevábamos aviso de que esa bajada no era muy recomendable y menos con tabla, así que al ver esa posibilidad tan clara, decidimos coger el Turra para caer a Lanslebourg.
A partir de ahí nos fuimos acercando hasta el punto más alejado de la estación, el TSF2 de Plan Cardinal y fuimos haciendo sucesivas bajadas hasta Lanslevillard, regresando poco a poco a Lanslebourg. Las sillas Arcellins II y Plan Cardinal dos TSF2 bastante lentos. Resto de sillas rápidas.
En cuanto a las pistas, son pistas variadas que, aunque tienen bastante camino de enlace, no resultan malos sino incluso bonitos. En general pistas estrechas en la zona despejada y amplias en la zona boscosa. La zona más alta de la estación, de todas maneras, no pudimos verla puesto que la visibilidad era nula y la silla que subía a la cota más alta estaba cerrada.
Algún fuera de pista hicimos por la zona del arrastre de Fema.
Los arrastres de la zona alta de Termignon con fuera pistas accesibles, asequibles, con final a la vista y disfrutones. Nos pareció un buen lugar para iniciarse en fuera de pista sin arriesgar demasiado.
Las pistas rojas que bajan a Lanslevillard, Lanslebourg y Termgnon son variadas, divertidas con cambios de rasantes y de peralte y por tanto entretenidas.
Aussois
El tercer día tal y como salió el tiempo decidimos acercarnos a Aussois, porque su orientación teóricamente Sur nos garantizaba que las nubes se agarraran en la otra vertiente del valle, como así fue.
Es una estación con dos orientaciones claras aunque en el plano de pistas no se aprecie. -Balmes aparte (estaba cerrada, y por desgracia no la hicimos aunque sí que era visible desde la estación y se apreciaba que da mucho juego a fuera pista)
Zona Orientación Sur.- A la llegada del TSD4 Grand Jeu hay un plateau servido por otras dos TS . El TSF Eterlou es ideal para el progreso de debutantes y el TSF Setive para progresar a pista roja.
Las pistas de retorno son amenas, variadas y con pendiente. La menos agradecida quizá es la pista Choullière, por ser quizá la menos natural de toda la estación, aunque tiene unas buenas vistas sobre el pueblo de Aussois, el valle de Maurienne y La Norma, que cataríamos al día siguiente.
Zona de Transición 2150 a 2600 .- Servida por el TSD6 Armoise que da acceso a unas pistas amplias, entretenidas, señalizadas y balizadas convenientemente.
El Plan Sec constituye una vaguada independiente de orientación W muy interesante, aislada visualmente del resto de la estación y con unos paisajes preciosos, y vistas a los lagos del Plan d’Amont y Plan d’Aval, el valle de Aussois y la Norma. Las pistas en esta zona son más técnicas, destacando la Roche, con una pala inicial de muy fuerte pendiente (evitable) un tubo con pendiente lateral, zona de bañeras, zona estrecha… y con unos paisajes preciosos.
Fournache.- Es un pequeño sector de orientación NW y cota que aseguran la mejor calidad de nieve de la estación. Se esquía de espaldas a la Dent Parrachée, pero las vistas son espectaculares y con una posibilidad de esquiar fuera de las tres pistas trazadas enorme.
El TSF2 que lo sirve es lento pero permite que las bajadas no estén saturadas, ni las pistas, ni los fuera de pistas. Es un vallón mucho más grande de los que se aprecia en planos.
En cotas bajas la nieve transforma por su exposición Sur, cosa que se ve perfectamente en el número de cañones que tienen.
De esta estación nos sorprendieron varias cosas:
La primera , que no es exclusiva de ella, es que se advierte una educación exquisita. En la zona más concurrida de la estación se encuentra un esquí relajado y tranquilo, y en la zona de la Fournache se ve más freeride. Pero cuando esos esquiadores se mezclan con el resto de la gente de la estación, resultan extremadamente respetuosos.
La segunda fue la señalización, que luego comprobamos era igual en La Norma y Galibier, efectiva como no había visto hasta la fecha en ninguna estación de esquí.
Y la tercera es el tipo de público, en general agrupado en dos franjas de edad. Niños aprendiendo y personas mayores de 65/70 años.
Las vistas de la estación son envidiables y el descenso de 2750 a 1500 realizable por múltiples variantes bien conectadas.
El pueblo es animado y turístico, con comercio suficiente y, al menos, mercado de productos típicos los martes.
La Norma
El cuarto día nos acercamos a La Norma.
El resumen perfecto es decir que se trata de un Artouste de 70 km de pistas. Con eso, no debería decir más ni podría decir nada mejor al respecto de esta joya.
Bosques de alerce y abeto que superan la cota 2000 perfectamente esquiables.
Remontes lentos, salvo el TSD4 Repose. El resto de sillas, de pinza fija (TSF3).
Estación muy vertical y con pistas muy técnicas y disfrutonas. La negra Norma II lisa y ancha y la negra Arcosses una delicia para los sentidos. Estrecha, con tubos y saltos en la entrada, bañeras grandes y gran pendiente. Probablemente la pista negra más entretenida que han pisado mis espátulas.
Pistas rojas estupendas, con cambios de rasante, peraltes, buenas pendientes, zonas amplias y estrechas, muy muy variadas. Azules entretenidas y la verde Ste. Anne ideal incluso para gente con tabla. Como en Artouste, se ve que son caminos sacados a la montaña porque las pendientes no permiten esas pistas.
Buen ambiente, muy tranquila, no parece tener muchas camas a pie de pista y bien de servicios dispuestos en el frente de nieve simulando un pueblo con callejas.
Esquí con vistas excepcionales desde Modane a Termignon, es decir, toda la Haute Maurienne y especialmente a Aussois.
Orientación NW, lo que hace de barrera a los vientos Piamonteses, (SE) mientras que en otras zonas del valle arreciaban
Las bajadas de máximos desniveles altamente combinables. Perfectamente señalizada. Posiblidades de fuera de pista en casi toda la estación.
Galibier-Thabor
El quinto día (no hay quinto malo) decidimos estirar un poco el viaje y subir al dominio del Galibier-Thabor. Este día pecamos de grandes errores, pero que nos dejaron grandes satisfacciones. El gran error fue no asumir que lo que se ve en el plano de pistas no refleja ni de broma la realidad de la extensión de las estaciones que conforman el dominio (Valmeinier y Valloire)
Otro gran error fue subir a Valloire en lugar de quedarnos en l’Armera (Valmeinier), teniendo que pasar el Col del Telegraph. Y os cuento brevemente las impresiones que sacamos de los diferentes sectores, aunque, como digo, no es estación para menos de una semana. Al menos bajo mi punto de vista con lo que vimos.
Sector Setaz.- Sin grandes cosas a notar. Pistas anchas con trazados agradables. Azules largas de bajada hacia Crey de Quart con perfiles buenos incluso para tabla. La caída por la ladera del TSD Cornafond ya es un fuera pista continuo entre árboles pero no en bosque. Incluso más al Sur de la pista Dahu había huellas por zonas muy interesantes.
Valloire Sector Crey du Quart.- Zona de Le Grand Plateau hasta Crey du Quart un verdadero “campo de nieve”. En las bajadas hacia el TSD Brive2 ya predomina más la pista.
Valmeinier Crey du Quart.- “Campo de nieve” en zona más Sur. Pistas hacia el Plan Palais. Es quizá, junto con lo que baja a Valloire 1500 lo más masificado de la estación porque son paso obligado de idas y retornos entre ambas estaciones para un porcentaje elevado de los usuarios.
Gros Crey.- Verdadera ladera servida por dos TSD y un TSF no demasiado lento. Toda la ladera es perfectamente esquiable. Otro campo de nieve.
La impresión general es que el plano no refleja la realidad del espacio esquiable. Da la sensación de que están las pistas muy juntas cuando en realidad están distanciadísimas y los espacios entre ellas, son realmente el atractivo de la estación. El trazado de pistas da la sensación de ser escaso sobre lo que podrían tener, pero suficiente y equilibrado para tener a un público pistero contento y un freeride contento.
Todo esto, si encima tenemos en cuenta que el forfait nos salió cada uno de los días por 23 €, pues la verdad es que no creo que se pudiera pedir más.
Hubo un día que entramos a Val Thorens, pero creo que de esa estación largo y tendido se ha hablado ya, así que no la he incluído en mis valoraciones.
Sólo sé que a Valmeinier-Valloire (probablemente con escapada a Les Karellis que tenía muy buena pinta también) volveré.
Y que La Norma probablemente sea de esas estaciones donde uno se siente que hace “esquí para ricos” por 23€
