La estación es pequeña y con encanto. Suele haber poca gente en pistas, la mayoría del público es local y holandés, que han establecido una pequeña colonia en Ehrwald.
Las pistas son de dificultad variada, si bien son un poco optimistas en su clasificación por colores. Yo no me atrevería a decir que las pistas clasificadas como negras sean tal, salvo algún tramo. Para la gente en busca de fuerapistas, las posibilidades se me antojan mínimas. Eso sí, cuenta con Fun Park. Especial mención, merecen las posibilidades para niños y debutantes. A partir de este año, han puesto en la pista de debutantes un telesilla de seis plazas. La preparación de las pistas es excelente, a mi esto me llama la atención en una estación tan pequeña.
La pista central, a pesar de estar clasificada como negra, para mi es una rojilla. Eso sí, con un muro en medio bastante negro. En esta pista suelen estar los cracks, bajando a toda pastilla. Especialmente hoy había gente de mucho nivel. A veces, también hay clubes entrenando.
Las pistas discurren entre abetos y alerces. La estación se asienta en la Wettersteingebirge, cordillera en la que se levanta el Zugspitze. Es una estación muy soleada. En un día como hoy, que casi anuncia la primavera, se disfruta de la vida.La vistas son impresionantes al valle de Ehrwald, en frente se ve Lermoos y Biberwier.
En definitiva, me parece ideal como estación de un día o mas para toda la familia. Hay que ser previsores, sobre todo en fin de semana, con los atascos desde final de la autopista hasta Garmisch. Teniendo en cuenta las posiblidades de la zona, también da para programar unas vacaciones de esquí en Ehrwald con muchos kilómetros de pistas.
