Los gansos pudieron comprobar las bondades y verdades del famoso Apre Esquí de Österreich. Un lujo formidable tras las gozosas jornadas de esquí en las que se bebió, se jugó, se bailó y se ligó, o se intentó.
Una vez más los gansos dejaron huella allá por donde pasaron, ya fuera en forma de albas estelas o en trazos espontáneos que dejaron bien alto el nombre de los gansos allá en Kuthai, ¡la quinta estación!
Allí se esquió a mansalva y se posó idem.
Victor y Jordi quisieron demostrar que no era necesario hacer peripecias peligrosas para coger una percha. Lo cortés no quita lo valiente.
La más firmes promesas del esquí ganso posa ufano con sus herramientas de disfrute después de bajar a todo trapo una pista negra en la gélida estación de Kuthai. Los paisanos no daban crédito a lo que veían: un chaval imberbe que bajaba deslizándose como alma que arrastraba el diablo.
Y llega la última noche en el acogedor Hotel Alpen donde sus propietarios atendieron al grupo ganso con exquisita atención. Y esa noche hay fiesta: Raúl y Montesinos cumplen 46 y 48 respectivamente. Los festejos se desarrollan entre el jolgorio y la algarabía general. Los homenajeados reciben sendos regalos y quedan profundamente emocionados ante un fin de expedición apoteósico.
A pesar de los impulsos lujuriosos del cochinito y de Raúl (no de los impulso lujuriosos de Raúl, sino de Raúl a secas), gansos y puercos sobrevivieron.
De camino a Munich, tras una gloriosa misión cumplida, el grupo se recrea en el bello pueblo de Garmisch donde hasta Jordi, imbuido por la magia del lugar, pareció transformarse en un actor de Western ítalo.
Finalmente, antes de regresar a casa, Munich. La satisfacción del deber cumplido, del gozo disfrutado, queda reflejada en ésta agraciada estampa.
Perdurarán en la retina de cada uno de los gansos los mil paisajes disfrutados:
Piztal
Serfaus
Venet
Hochzeiger
Kuthai
Pero sobre todo perdurarán en nuestra memoria los buenos momentos vividos con un grupo excepcional.
Página 1: Gansos en Austria 2009