La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha ejecutado la resolución de extinción del aprovechamiento de aguas del arroyo El Telégrafo (de 6 de julio de 2022), con destino a usos industriales, del que era titular el Ayuntamiento de San Ildefonso-La Granja (Segovia).
Por resolución de este Organismo, a fecha 30 de agosto de 2022, se acordó la ejecución mencionada, imponiéndose al concesionario la obligación de desmantelar la totalidad de las instalaciones correspondientes a la concesión extinguida. Además, se puso en conocimiento de los interesados en el expediente de extinción.
Transcurrido el plazo de un mes desde la notificación, y al comprobar que el concesionario no había procedido a retirar las instalaciones correspondientes, la CHD, a través de la Comisaría de Aguas, procede a restituir el dominio público hidráulico.
De esta forma, con fecha 10 de octubre de 2022, se comunica la actuación y se convoca al alcalde del Real Sitio de San Ildefonso, en representación del Ayuntamiento, titular de la concesión de aguas extinguida, a los técnicos de Parques Nacionales y a un técnico de la Confederación. En ese momento, se definen los trabajos de restitución y se procede a eliminar el azud de derivación y la arqueta de toma.
El 27 de octubre de 2022, un agente medioambiental de la Comisaría de aguas constata la construcción ilegal de un nuevo pozo para la toma de agua en el arroyo El Telégrafo, en el mismo lugar del eliminado el pasado día 10 de octubre.
Tras tener conocimiento de este suceso, el Organismo ha abierto diligencias a fin de determinar la autoría de tales hechos y ha procedido el pasado 31 de octubre a la eliminación de la construcción realizada ilegalmente en dominio público hidráulico.
Denunciaron vandalismo
Según cuenta Ganar Sierra en su cuenta de Instagram, el pasado 10 de octubre se dieron cuenta de que alguien había desmontado la instalación. La empresa concesionaria tomó datos supuesto del acto vandálico, lo denunció ante la Guardia Civil y procedió a su restitución.
Pero pocos dias después, el 31 de octubre, a primera hora de la mañana volvieron a ver que de nuevo estaban desmontados. En esta ocasión se tuvo que utilizar maquinaria pesada para acceder a la zona, por lo que según la asociación "Salvemos Navacerrada",
Los cañones de nieve artificial de la estación de esquí de Navacerrada se instalaron en 1994 gracias a un permiso de la Confederación Hidrográfica del Duero para tomar parte de las aguas del arroyo del Telégrafo.
La Confederación Hidrográfica del Duero entiende que como el permiso para explotar comercialmente los terrenos para el esquí han caducado, lo mismo debe suceder con los permisos de toma de agua.