Las grandes nevadas caidas estos días han creado grandes acumulaciones de nieve en las montañas del Pirineo y de la Cornisa Cantábrica. Si la parte positiva es las espectaculares condiciones que hay actualmente para esquiar, la cara negativa es el riesgo de aludes en algunas zonas situafas fuera de las estaciones, menos controladas por el personal de pistas.
Es el caso de la estación de esquí de Astún , donde dos esquiadores acabaron sepultados por un alud ayer viernes por la mañana. La avalancha no era de grandes dimensiones, pero se llevaron un gran susto. La caida de la nieve se desencadenó al paso de uno de los propios afectados, tal como reconocieron ellos mismos. Según explicó el centro invernal al Diario del Alto Aragón, sucedió fuera de pistas.
Uno de los esquiadores conseguió salir por su propio pie, mientras que el otro ha tenido que recibir la ayuda de varios esquiadores y del personal de la estación al verse sepultado por la nieve. Ninguno de los dos afectados presenta heridas de gravedad causadas por este incidente.
Desde la estación de esquí de Astún recuerdan que el riesgo de avalanchas se encuentra en un nivel 3 (en la escala del 1 al 5). Por ello, aconsejan precaución a los esquiadores que acudan al centro invernal durante el puente y les recomiendan esquiar solo por las pistas que han sido debidamente preparadas por sus trabajadores y que forman parte de su dominio esquiable.