Jornada de contrastes en el estreno de los Mundiales de esquí alpino de Are (Suecia). Lindsey Vonn, en su última aparición antes de la retirada, sufrió un fuerte accidente el supergigante, una prueba en la que se acabó imponiendo su compatriota, la corredora de 23 años Mikaela Shiffrin, tras una nueva exhibición en un descenso muy técnico.
Shiffrin se colgó su cuarto oro en un mundial, aunque este fue el primero en una de las pruebas consideradas de velocidad. La de Vail aventajó en apenas 0.02 a la italiana Sofia Goggia (plata) y en 0.05 a la suiza Corinne Suter (bronce).
Tras cinco minutos en los que la carrera estuvo interrumpida, la esquiadora se pudo incorporar por su propio pie y bajó esquiando hasta la meta saludando a los aficionados. La última cita en su carrera deportiva para la mujer con más victorias en la Copa del mundo será el próximo domingo en el Descenso, si es que la caída en el supergigante se lo permite.