A principios de este año se metió en el Snozone de Milton Keynes, población situada a una hora y media de Londres. Parece que le cogieron gusto a la idea, y ahora se han colado en la tambien pista cubierta de Chill Factore, en Manchester.
Básicamente lo que hicieron es esperarse a la hora de cierre, esconderse y salir en cuanto las instalaciones estuvieron vacías. Se tiraron por los toboganes de nieve, usaron las bicis y hasta esquiaron en la pista. En un momento dado se encuentran con un seguridad, pero se las arreglan para convencerlo de que tenían autorización para gravar ahí dentro.
Y ahí está la pregunta ¿realmente tenían autorizacion? Por que muchos se preguntan, como es que estaban las instalaciones con tantas luces abiertas, y como se le puede engañar tan facilmente al personal de seguridad.
Sea como fuere, Chill Factore afirma que se enteró al poco rato de que salieran, porque a Ryan Taylor se le olvidó la cámara, y como los de la pista de esquí cubierta no se la quería devolver, les puso una denuncia en comisaría (encima!). Finalmente el aparato fue devuelto, y el youtuber aseguró que editó el video desde el mismo establecimiento policial.
En el camino se han quedado para la posteridad media hora de grabación del interior de Chill Factory, donde se puede ver perfectamente que actividades se pueden hacer. Hasta el punto que parece que haya sido realmente todo un anuncio.
Os dejamos el video para que saqueis vuestras propias conclusiones...