Lograr dar con la bota adecuada a tu pie es una de las tareas más complicadas a la hora de comprar el material de esquí. Lo habitual es ir a la tienda, y dependiendo de tu tipo de pie, el comerciante sepa acertar con más precisión cual es la marca que te va a ir mejor. Aún así se recomienda que con la bota puesta el cliente se esté un rato sentado o andando con ella puesta. De esta manera el profesional de la tienda se asegura que el cliente se va satisfecho.
Todo esto evidentemente no se hace en un rato, sino que a menudo puede llevar una hora larga hasta dar con el material adecuado. Muchos clientes no tienen reparos en, una vez saben el número y marca de la bota, se largan y la piden en Internet para ahorrarse unos pocos de euros.
Cada vez son más las tiendas que quieren dejar de quedarse con cara de tonto y tratan de poner coto a esta práctica. De momento la única solución ha sido cobrar por lo que ellos llaman "asesoramiento y análisis" de pie del cliente. El coste suele rondar entre los 30 y 50 euros, que en caso de que el cliente se quede la bota, se le descuenta por entero.
La última de las tiendas que han empezado a aplicar este servicio es la madrileña Ski Market, tal como cuenta
CMD sports. La tienda ha decidido avisar a sus clientes de que el establecimiento cobrará por el servicio de asesoramiento y prueba de las botas de esquí, lo que ha empezado a denominarse como ‘showrooming’, algo cada vez mas en auge en nuestro país.
Álvaro Lozano, copropietario de Ski Market, explica a CMD Sports, que desde la pasada temporada,
“tenemos impresos unos carteles en la tienda en los que avisamos de que el servicio de asesoramiento, análisis y medición del pie y prueba de las botas cuesta 50 euros. El personal del comercio realiza un completo estudio subiendo al cliente a una plataforma digitalizada desde la que se miden todos los puntos de presión del pie gracias a un avanzado sistema con tecnología punta. Si el usuario compra la bota en nuestra tienda, este servicio no se cobra, pero si lo que quiere es saber su talla y qué bota se adapta mejor a su pie para luego comprar en Internet, tiene que abonar 50 euros. Además, el cliente de Ski Market recibe un servicio de personalización de la bota indefinido.
El confundador del negocio madrileño sostiene que esta medida sirve para disuadir al consumidor cuya intención era probarse la bota, conocer su talla y buscar luego mejor precio en operadores online.
“Las consultas tienen un precio”, defiende Lozano, quien asegura que la iniciativa no ha generado ningún malentendido con los clientes, ya que
“informamos a los compradores de botas de que hay un protocolo muy claro; es un filtro para el showrooming”.
De todas maneras,el copropietario de Ski Market detecta que cada vez los usuarios son más conscientes de que
“comprar una bota de esquí por Internet puede ser uno de los errores más garrafales en la vida de un esquiador”.
Nueva organizacion comercial del producto
Ski Market, que tiene a sus espaldas una trayectoria de 22 años, acaba de unificar sus dos puntos de venta. El que tenía en San Sebastián de los Reyes lo ha cerrado, y a cambio ha ampliado el que tiene en Las Rozas gracias a la incorporación de una nave adyacente. Ahora son 750 metros cuadrados de superficie comercial, la misma que tenía antes pero ahora en un solo punto, con la ventaja que significa poder agrupar toda la oferta, con más producto y una mejor exposición.