Nunca ha trabajado en el Pirineo, por lo que el encargo de Piau Engaly será el primero de Wilmotte en este macizo montañoso. Y lo hace por voluntad propia. La estación lanzó un concurso público para la remodelación y desarrollo de su zona de alojamientos, y el famoso arquitecto francés fue una de las dos candidaturas que se presentaron.
El proyecto contempla rediseñar las zonas comunes de Piau Engaly, y completar el edificio semicircular de la estación. Nunca se llegó a acabar, y ahora incluso presenta algún deterioro lo que hace que muchas de las camas de esta zona no se puedan comercializar. Además se realizarán otros proyectos inmobiliarios con el mismo objetivo, que se puedan vender estancias, algo de lo que adolece la estación y le impide crecer frente a sus competidoras. Tienen más de 22.000 m2 de terreno construible y con todo, se podrán crear más de 1.500 camas nuevas.
La estación ha cerrado este con unos número espectaculares. De hecho los de este 2017 son los mejores en 17 años. Pero son conscientes que ha sido gracias a la falta de nieve de sus competidoras. Saint Lary por ejemplo apenas tenía pistas abiertas a principio de temporada, por lo que los esquiadores alojados en aquel pueblo, subían hasta Piau Engaly, a apenas 20 minutos en coche. Con este proyecto esperan que la estación pueda tirar adelante por sí sola, sin esperar a que fallen otras.
