Tras la caída del mercado inmobiliario que comenzó en 2008 y ante la disminución de ingresos, uno de los primeros activos que algunas familias se desprendieron fueron las segundas residencias con el objetivo de concentrar los gastos en la vivienda familiar. La montaña no se escapó a esta situación y se han registrado fuertes bajadas de precios de mas del 50% en estas residencias vacacionales.
La situación parece estar cambiando, al menos en dos de las principales zonas del Pirineo en cuanto a la segunda residencia, ya sea por el volumen de unidades como del precio de venta. La mayoría de estas propiedades premium de la Cerdanya y la Vall d'Arán son destinadas a segunda residencia,las hay que incluso tercera residencia, ya que sus propietarios combinan sus vacaciones de invierno en la montaña con las de verano en su casa en la costa. Se usan muy pocos días al año, en general coincidiendo con la temporada de esquí. Después de unos años en caída libre este mercado parece recuperarse.
En la Vall d'Arán por ejemplo las casas mas codiciadas son las situadas a pie de pista de Baqueira Beret. Las inmobiliarias locales ya están viendo como los precios han vuelto a los de hace 10 años. El pvp medio del m2 está en los 5.000€/m2 y pese al coste vuelve a haber ganas por comprar. Aquí el principal reclamo es el no tener que tomar el coche para ir a pistas.
El perfil medio del comprador es alguien que lo hace por impulso. La mitad de ellos de Madrid y un 20% catalán, si les gusta una casa la compran sin pensárselo mucho. También hay valencianos, vascos, y hasta residentes en las Islas Baleares. Pero del otro lado del Pirineo también se están acercando. La cada vez mayor fama de calidad de Baqueira traspasa fronteras y se empieza a ver clientes franceses, especialmente de Burdeos, donde además la estación hace una campaña promocional cada año. Tolousse tampoco se escapa. La ciudad está creciendo en población gracias a los nuevos de alto nivel que genera gracias a la fábrica de Airbus y empresas auxiliares que se han ido instalando en los alrededores.
Lejos de pararse la construcción de viviendas, aquí ha seguido a un ritmo constante. Siempre promociones pequeñas en esta zona de Baqueira, la última de 40 viviendas con entrega en 2016 ya está casi toda vendida.
Si en Baqueira la cercanía a pistas es su principal atractivo, y por tanto el único reclamo, en la Cerdanya el cliente valora también la oferta de verano. Asignatura pendiente en la la Vall d'Arán, aquí Masella/La Molina atraen clientes en invierno, mientras que del verano se ocupan los campos de golf y las hípicas. Tanto es así, que algunas urbanizaciones premium, mas cercanas a Puigcerdà pero igualmente a menos de 20 minutos de pistas, son preferidas por su cercanía a oferta alternativa al esquí. La posibilidad de aprovechar esta segunda residencia mas meses al año hace que los precios sean incluso mas altos que la Vall d'Arán, llegando a subir hasta los 6.000€/m2.
La proximidad a Barcelona también es un plus. La construcción del Túnel del Cadí y la ampliación de la autopista hasta Berga, hace que el viaje sea de apenas una hora y media hasta las pistas en un viaje cómodo, siempre y cuando se evite regresar en ciertas horas punta de ciertos días en temporada de esquí.
Aquí en su mayoría son compradores catalanes, y además quieren casas grandes para hacer un uso mas familiar. Además no tienen prisa por comprar. Se miran mas la `pela' y aprietan en el precio. La propiedad media mas vendida en los últimos meses en la Cerdanya es una casa de 300 a 350m2 con una parcela de 2.000m2. El coste, entre los 500.000 y el millón de euros. Las hay que hasta 5,5 millones.