Vallter 2000 reducirá su actual trazado, ampliará la nieve producida a 1.500 metros de pistas con nuevos cañones, y reinstalará los 23 de la pista Xalet en las de Barquins i Puig dels Lladres. Con esta concentración de cañones, la instalación verá reducido su dominio, pero garantizará la apertura al completo de la estación, después de unos años en los que la falta de nieve ha derivado en la pérdida de 31.000 visitantes al pasar de 64.000 a 33.000 la última temporada.
Enric Ticó ha justificado esta apuesta de la Generalitat por recuperar Vallter 2000 en la repercusión que tiene en la población cada euro que se genera en un área de esquí. La solución pasa, para Ticó, por la aplicación de este nuevo modelo de explotación, en el que se dará prioridad al fomento de actividades que permita atraer clientes durante todo el año. Esta "desestacionalización", según ha explicado el presidente de FGC, es una realidad en las otras estaciones que gestiona la Generalitat hasta el punto de que el incremento de negocio este verano ha sido de un seis por ciento.
La falta de nieve, en todo caso, ha sido el principal problema de Vallter 2000, que tuvo un pico de pérdidas en la temporada 2007-08 de 870.000 euros.
En esta dinámica, FGC potenciará el producto conjunto de Vallter 2000 y la vecina estación de Vall de Núria con la organización de carreras entre ambos dominios tanto en la campaña de invierno como en la de verano.
El objetivo es que Vallter 2000 recupere en el plazo de dos años los 64.000 visitantes anuales por lo que los forfaits se rebajarán en más del 20 por ciento hasta situarse en 25 euros el de adulto, con lo que se entra, en palabras de Enric Ticó,