Parece que finalmente Corea del Norte se saldrá con la suya, y este próximo invierno podrá inaugurar su ansiada estación de esquí. No han sido pocas las trabas que se le han puesto para poder construir el complejo invernal. Este verano estuvo tratando de comprar un remonte a varios fabricantes, pero las sanciones impuestas por la ONU impedía que ninguna empresa pudiera servirlo. Y es que no tiene mucha lógica que en un país donde la mayoría de sus habitantes pasan penurias para encontrar comida, su líder quiera comprar un telesilla que cuesta millones de euros.
Pero al parecer la empresa suiza BMF ha logrado poder vender un telesilla, pese a que en un principio el Gobierno helvético impidió la venta, siguiendo el embargo impuesto, que solo permite exportar a ese pais, material de primera necesidad, alimentos y medicinas. No ha trascendido la fórmula de la operación, pero al parecer el Gobierno norcoreano estaba buscando una empres china que hiciese de mediador, de manera que comprase el aparato, y luego se vendiese a Corea del Norte. De esta manera Suiza vendía teóricamente, a China. Es la misma fórmula que se usa por ejemplo, para comprar diamantes al Congo. Este país los vende a otro, y éste los pasa a Europa. O la misma solución que encontraron los judios para consumir pistachos iranís: Turquía hacia de mediador. Hecha la ley, hecha la trampa...
Kim Jong Un, 'amado líder' coreano estableció como prioridad nacional la inauguración de esta estación para este próximo invierno, y vaya si han corrido a tenerla lista. Miles de soldados se han esmerado estos 10 meses en llevar la tarea a cabo, en muchos casos acarreando piedras con la fuerza de sus brazos.
El objetivo de Kim Jong Un, al parecer gran aficionado al esquí de sus años en que estuvo estudiando en Suiza (con pasaporte falso de nacionalidad china), es poder disputar alguna prueba olímpica en los Juegos de Invierno que Pyeongchang ha de organizar para el mes de Febrero de 2018. Está por ver si el COI permitirá esta intención, ya que entre otras exigencias, está que las pruebas se organicen todas en una misma localidad, o como mucho a u máximo de dos horas de la sede principal, y nunca, repartir las disciplinas entre dos países.
Otra de sus metas es tener todo un campeón olímpico en solo unos años. Ojo, que cuando a este gobierno se le poner algo entre ceja y ceja, no se les ha de tomar en broma. Ya han ganado dos medallas en los Juegos Olímpicos de Invierno, aunque las dos en patinaje de velocidad.
En el propio país, las cifras mas optimistas calculan en unas 5.000 las personas que saben esquiar Es decir, apenas un 0,2% del total de la población, y los precios para poder hacer este deporte son tan caros, que se duda que alguien pueda costearse aunque fuera, una simple escapada.
Este próximo jueves se inauguran los primeros chalets, las pistas de esquí y la de trineos. Cientos de funcionarios esperarán pacientemente en sus puestos de trabajo a que caigan los primeros copos de nieve para empezar a trabajarla y que la puedan disfrutar los esquiadores... los que vengan...