Una supertormenta permite reabrir una estación cerrada hace tres años

El Este de los Estados Unidos está viviendo uno de los episodios de nieve más importantes de los últimos años. Muchas ciudades han quedado bloqueadas, entre ellas algunas tan importantes como Nueva York o Boston. Algunos han aprovechado para esquiar por sus calles, pero otros lo han hecho para poner en marcha remontes parados desde hace años.

Es el caso de la estación de Big Squaw Mountain Ski Resort, en Massachusets, que cerró en 2009 después de que su propietario no pudiese hacer frente a los gastos, que eran superiores a sus ingresos.

Después de unas negociaciones durante este tiempo en el que se barajó su venta, finalmente no encontró comprador, por lo que el propietario decidió alquilar por 1 dólar las instalaciones a una entidad sin ánimo de lucro llamada 'Friends of Squaw Mountain' compuesto por 50 voluntarios y un buen número de pequeños empresarios, que han ayudado a restaurar el edificio y las instalaciones. Y ese grupo ha podido reabrir las instalaciones este domingo 10 de febrero tras la enorme cantidad de nieve que ha caído.

La estación cuenta con 33 pistas y un telesilla, el cual sufrió un accidente en 2004, que limitó su operativa, la principal causa por la que mermaron los ingresos hasta su cierre. El forfait cuesta 20 dólares, un precio de risa para lo que se paga en Estados Unidos, pero se aceptan donativos. También se propone a quien lo quiera, comprar una de las sillas triplazas del remonte, por 500 dólares. A cambio se pondrá su nombre en él.