Los precios de los forfaits de esquí de las estaciones andorranas son más competitivos que los de los dominios vecinos del resto del Pirineo, según un informe de Ski Andorra que se basa
en el servicio que ofrecen los remontes mecánicos. Así lo explica el actual presidente de Ski Andorra, y a la vez cónsul mayor de Ordino, Ventura Espot:
"A través de un estudio de los remontes mecánicos de Suiza se concluyó que el precio no debe orientarse nunca hacia la prestación del transporte, sino hacia el tiempo y la rapidez de cada aparato. Y que lo más importante es llevar el máximo de gente posible lo más rápido posible. Partiendo de este hecho, se valorarán los servicios.
Y por lo tanto, tomando esta premisa de comparativa, si un remonte lleva al esquiador tarde y mal, se debería valorar si el tratamiento que se le da es el adecuado o no".
Las cifras son claras. El informe que expone Espot señala, por un lado, como
Grandvalira, con 193 kilómetros equiables, tiene un forfait en temporada alta de
42 euros y una capacidad para transportar 100.000 esquiadores cada hora. Paralelamente, el dominio de
Baqueira-Beret, que sería comparable por la extensión de las pistas, 120 kilómetros esquiables, vende el forfait a
45 euros y sus remontes trasladan casi la mitad de usuarios por hora: unos 58.000.
Por otra parte, el presidente de Ski Andorra compara
Vallnord con otras estaciones vecinas con unas características similares y los datos también evidencian diferencias entre unas y otras. Mientras que en el dominio andorrano de los valles del norte se ha establecido en
37 euros el precio del pase de invierno en temporada alta, en
Masella y
Cerler lo han instaurado en
39 euros. Pero, en cambio, Vallnord tiene capacidad para transportar unos 55.000 esquiadores cada hora, la cifra en Masella se queda en 40.000 y Cerler baja hasta los 26.000 por hora.
Boí-Taüll, más barato
La estación catalana de
Boí-Taüll, que se puede comparar también con Vallnord por las características y los servicios que ofrece, tiene un precio más reducido, pero también una capacidad de remontes menor. La entrada de un día cuesta
36 euros y los remontes pueden transportar unos 19.000 esquiadores cada hora.
"Con todos estos datos se ve que el precio del forfait no es tan caro, hay que analizar todo. Además, hay que pensar que hacer nieve es carísimo, por la inversión que debe hacerse, y que un telecabina desembragable de seis plazas cuesta unos 5 millones de euros. Y este dinero se deben amortizar".
Finalmente, los informes de Ski Andorra también plasman que sólo un 15 por ciento de lo que un turista se gasta cuando viene a esquiar se destina
al forfait. El resto del presupuesto de la estancia se va a tiendas de alquiler, restauración y comercio.