La pequeña estación de
Coll de Pal, es la única que queda en la provincia de Barcelona tras el
cierre hace cuatro año de Rasos de Peguera. Lejos de quedarse atrás, la pequeña instalación invernal ha ido buscando fórmulas que le garantice su viabilidad y futuro. Fruto de estas iniciativas han sido los
nuevos cañones de nieve artificial que garantizan la nieve en la
pista de Comabella, la que le conecta a La Molina, que ya están en funcionamiento tras superar el periodo de pruebas.
![Coll de Pal](https://www.nevasport.com/fotos/231108/231446.jpg)
Aún así, lo más importante no es la instalación de estos innivadores, sino las obras de infraestructura que se han realizado al mismo tiempo. Esta obra servirá para albergar el
futuro edificio de servicios de Coll de Pal. Así, ya se ha montado la instalación eléctrica (reivindicación histórica), y también un sistema de canalización de las aguas residuales. El futuro edificio de servicios tendrá
800 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, con aparcamiento exterior y acogerá servicios de
restauración y picnic y un espacio para la
escuela de esquí.
A la estación ya se puede acceder con el mismo forfait que el de
La Molina, y es por eso que aprovechando la celebración de la
Copa del Mundo de esquí alpino que se celebrará este año, el Ayuntamiento de Bagà, dueño de las instalaciones municipales, aprovechará para
promocionar la práctica del esquí entre los escolares de los pueblos más grandes del Alt Berguedà (Guardiola, La Pobla de Lillet y Bagà) preparando jornadas en la nieve.
A parte de los nuevos cañones de nieve artificial y la base del nuevo edificio de servicios, se ha
mejorado la pista de la Comabella, un antiguo itinerario fuera pista que servía para llegar hasta La Molina, y que ahora estará al alcance de todos los públicos. Además se ha instalado
una cinta transportadora para la zona de debutantes y se han colocado paranieves en la zona alta de la pista de la Comabella.