En la primera de las avalanchas (ocurrida en los alrededores del refugio de montaña del López) quedó atrapado bajo la nieve Mauricio Aguirre, un joven de Bariloche que había ido de excursión a la montaña con un amigo, quien logró salir ileso del alud de nieve. Aguirre fue evacuado de la montaña sin vida en una ambulancia de Gendarmería Nacional y luego trasladado a otra del hospital zonal, donde hasta las 21h. intentaban revivirlo. En el otro accidente, el francés Dimitri Roux, de 20 años, fue a esquiar a la cara sudeste del cerro Catedral, lejos de las pistas habilitadas, cayó en un pequeño cañadón que intentaba cruzar y terminó sepultado bajo un metro y medio de nieve.
Con él iban dos amigos, un español y un francés, quienes dieron aviso por intermedio de un celular a la empresa concesionaria del centro de esquí, Catedral Alta Patagonia, que llamó a los rescatistas para reorganizar la emergencia. Los socorristas se dividieron en grupos, y mientras uno se quedó en el López buscando bajo la nieve con sondas, los demás concurrieron a Catedral con el perro adiestrado para este tipo de rescates.
Así lograron dar con Roux y desenterrarlo ya sin vida, y también intentaron reanimarlo durante casi una hora, sin lograrlo. En este caso los tres esquiadores aprovechaban la nieve nueva caída ayer en la montaña para practicar "fuera de pistas", como se conoce a la modalidad de deslizarse en sectores de la ladera a los que sólo concurren esquiadores expertos.
Uno de los rescatistas relató a los medios de prensa locales que el alerta de Catedral llegó justo cuando se estaban acercando al sector de la avalancha del cerro López caminando y también esquiando. Dijo que al llegar al lugar de la avalancha del Catedral les tomó apenas diez minutos dar con el lugar en donde estaba enterrado bajo la nieve Roux, y otros diez minutos desenterrarlo. Tenía las vías aéreas obstruídas y no tenía pulso ni respiración. En cambio, Aguirre estuvo varias horas bajo la nieve en un sector señalado por su amigo y otros testigos de la avalancha, y cuando lograron sacarlo a la superficie también estaba ya sin signos vitales.
El rescatista expresó su preocupación porque el caso del Catedral sacó a la luz que son muchos los esquiadores y snowbordistas que van a hacer fuera de pistas sin estar técnicamente preparados para esa práctica, que es muy peligrosa. También advirtió que las condiciones climáticas de la primavera, sumadas a una nevada tardía ocurrida entre ayer y hoy, aumentan el riesgo de avalanchas en los cerros de la región, por lo que recomendó no transitar estas laderas.