La leyenda, que es igual tanto para un lado del 'charco' como para el otro, aunque con diferentes estaciones de esquí, cuenta que un matrimonio estaba esquiando, cuando a la mujer le vinieron unas irrefrenables ganas de ir al lavabo. Dado el tiempo que se presumía que iban a tardar en llegar al lavabo más cercano, el marido le sugirió que ya que vestía un mono de esquí blanco, se metiera en el bosque que no la verían y allí se aliviara como bien pudiera. La cuestión es que, como todos sabemos, hay dos formas de pararse en la nieve con los esquís puestos. La buena te deja en el sitio en que te has quedado, la mala te puede hacer caer iremisiblemente ladera abajo. Y es esta última la manera con que se paró con los pantalones bajados hasta las rodillas, con la inevitable consecuencia de empezar a caer ladera abajo enseñando carne desde el ombligo hasta las rodillas. Según dice la versión, la mujer se rompió un brazo en la caída, lo que hizo que no pudiera agarrarse los pantalones. Pero llegó abajo, su marido avisó al servicio de socorristas y la metieron en una camilla. Allí encontró un 'compañero de fatigas', un esquiador que se había roto una pierna. -"¿Como se ha roto la pierna?" preguntó la mujer al herido. -"Pues mire usted. No se lo va a creer, pero estaba en el telesilla cuando vi bajar por aquella pista a una esquiadora con los pantalones bajados hasta las rodillas, y enseñando todo lo que se enseña al doctor cuando uno nace. Tanta era mi incredulidad, que a medida que la silla avanzaba, yo me fuí girando, hasta tal punto, que hice un falso apoyo del esquí derecho y caí al suelo. Por suerte había poca altura" a lo que el hombre siguió, "¿y usted? ¿Como se ha roto el brazo?" |
Variaciones:
-Esta leyenda se cuenta tambien como un suceso en Silver Springs, Aspen, Vail, Suiza, durante un descenso de competicion en Suecia, en la estacion de esquí de Snowy Mountains en Australia, en los Alpes franceses, y tambien se ha contado en España, tal como contaba al principio del todo.
-Se dice que la mujer era en unas veces azafata, en otras una canadiense, mexicana o de Texas.
-Respecto al hombre herido, unas veces se dice que cayó de un telesilla, y otras que cayó cuando al estar esquiando entre arboles, esa mujer le pasó por encima.
-Lo que no falla en esta Leyenda Urbana, es que era una mujer la que caía, y un hombre el que lo vió todo, y claro, alguno podrá decir que ningun hombre se baja los pantalones, pero hay una ocasion de alivio, que sí lo hace!
Orígenes
Se cree que este Leyenda Urbana apareció a mediados de los años '70 a ambos lados del atlántico y a pesar de que algunas personas la quisieron situar como una noticia escrita en un diario de New Orleans, nunca ha aparecido ningun diario con ese artículo.
De cualquier manera, esta si que debe ser la única Leyenda Urbana con referencias al esquí.