“Yo quiero ayudar y si soy referente es todo un orgullo, pero no quiero cargarme la responsabilidad de tirar del carro señaló Rienda. La granadina, cuya ilusión sería subir a un podio olímpico en los Juegos de Turín del año próximo, reconoció que el esquí “es un deporte muy difícil y muy técnico y en España estamos un poco atrasados técnicamente. Hay que estar fuerte física y psicológicamente. No hay claves, simplemente el día a día y buscar siempre la mejoría”.
La esquiadora de 29 años rechazó que detrás de ella no haya un relevo y destacó el trabajo que están haciendo otros esquiadores españoles, como Carolina Ruiz y un grupo de chicos jóvenes de 16 ó 17 años, que están trabajando muy bien en la Copa de Europa. “Si tienen la misma ilusión y las mismas ganas pueden llegar. En España si no eres el número uno no se oye nada, pero ser quinto también es muy importe”, agregó.
Por su parte, Jaime Lissavetzky aseguró que los triunfos de Rienda “abren unas perspectivas positivas para el esquí español” y adelantó que, además de la subvención ordinaria, la Federación dispondrá de 457.000 euros para preparar los Juegos de Turín 2006. “Las victorias de María José son consecuencia del trabajo bien hecho y abren unas perspectivas muy positivas”, afirmó el Secretario de Estado para el Deporte Español, que agradeció a la granadina su mención constante al respaldo de los técnicos de la federación en su trabajo y “su aportación al esquí alpino español y mundial”
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