La colaboración se extenderá a los proyectos que estén a un kilómetro del límite común.
La Comisión Mixta de Coordinación de Proyectos Medioambientales de Cantabria y Castilla y León estudiará todos los proyectos que se desarrollen a un kilómetro de distancia de la franja territorial que divide las dos regiones, según acordaron ayer los miembros de la comisión en Valladolid.
Aunque la comisión nació para solucionar la polémica sobre la instalación de parques eólicos en la Montaña Cántabro-Burgalesa, el director general de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, Ángel Irabieri, anunció que se analizarán otras áreas como por ejemplo la creación de estaciones de esquí.
Es en este aspecto en el que se verá beneficiado diréctamente el proyecto de una futura estación de esquí en San Glorio, iniciativa que limita con las comunidades de Castilla y León y Cantabria. Precisamente, las futuras instalaciones invernales tendrían parte de su territorio, la mayoría del mismo, en Castilla y León, concretamente en el municipio de Boca de Huérgano y la localidad de Llánaves de la Reina. No obstante, la estación también cogerá una parte importante de territorio en Cantabria y en la provincia de Palencia.
El primer compromiso que tendrán que cumplir, antes de la próxima reunión que se celebrará en Santander el 26 de noviembre, es el intercambio de información entre los técnicos de los proyectos enmarcados en esta franja territorial. Como confirmó el secretario general de la Consejería de Medioambiente, José Manuel Jiménez, será el paso previo para concretar en qué parcelas se actuará.
Jiménez insistió en que esta ha sido la primera toma de contacto y que la Comisión Mixta no se ceñirá sólo a los parques eólicos. Los dos portavoces destacaron que se abordarán otros proyectos intercomunitarios que rebasen la franja de los dos kilómetros, siempre que ambos gobiernos entiendan que afecten a territorios comunes.
La comisión se creó cuando el Gobierno de Cantabria reclamó a la Junta de Castilla y León la retirada de algunos parques eólicos que se encuentran en el límite entre ambas regiones, pues impediría la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la Montaña Pasiega, un objetivo en el que están inmersas instituciones, organismos y colectivos cántabros.
En la reunión participaron además de los dos responsables de medio ambiente, el director general de Energía y Minas de Castilla y León, Manuel Ordóñez, y el director general de Patrimonio y Bienes Culturales, Enrique Saiz. Por parte del Gobierno de Cantabria, también estuvo presente el director general de Industria, Pedro Obregón, el de Montes y Conservación de la Naturaleza, Máximo Sainz, y el director de Cultura, Justo Barreda.
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