El doctor Luis Carús, que actualmente imparte clases en la Universitat Jaume I de Castellón, aboga porque las estaciones de esquí del Pirineo catalán se acaben convirtiendo en un futuro próximo en “centros turístico recreativos de alta montaña”, siguiendo así la tendencia de los Alpes y las Montañas Rocosas (EEUU).
Carús considera que el Pirineo de Lleida solamente romperá con la estacionalidad en el turismo si sus empresas punteras –los complejos invernales– “abren todo el año y ofrecen actividades alternativas al esquí” como podría ser, citó, la apertura cerca de un balneario, la construcción de campos de tenis y golf, entre otras muchas posibilidades.
Carús presentó ayer por la tarde en la Diputación de Lleida el libro “Turismo blanco: Análisis estratégico comparado de ubicaciones de recreo de alta montaña: Alpes, Rocosas y Pirineo leridano”, que ha sido coeditado por el Patronat de Turisme de la Diputación de Lleida y la Universitat de Lleida.
Este estudio es el resultado de la investigación realizada por el autor para la tesis doctoral “Análisis estratégico del segmento turístico recreativo de alta montaña: el caso del Pirineo de Lleida”, que fue leída en la Universitat de Lleida y dirigida por el doctor Manuel Ruiz González.
Carús, natural de Santander y que trabaja desde años en la estación de esquí de Baqueira Beret, animó a la empresa propietaria de este complejo a que lo convierta en un centro turístico recreativo de alta montaña abierto durante todo el año, es decir, más allá de la temporada de esquí, a la vez que ofreciendo actividades alternativas al esquí durante el invierno.
El profesor universitario considera que la Val d’Aran no debe depender en tanta medida de que haya nieve en Baqueira Beret para asegurar la campaña turística de invierno y alertó de que alguna ocasión por razones meteorológicas la apertura de las pistas en condiciones ha estado en peligro.
Por ello, instó a que Baqueira Beret se convierta en un gran centro recreativo de alta montaña, que pilote además de en el esquí en otras actividades complementarias, para no depender de los “milagros”. De esta forma, se refería a que en alguna ocasión cuando se ha estado a punto de estropear la temporada por falta de nieve ha nevado a última hora. Para Carús, el objetivo está claro: se debe lograr que la alta montaña sea un gran polo de atracción de turistas los 365 días del año.
Sobre la posibilidad de que abran nuevas estaciones de esquí en el Pirineo, señaló que si están concebidas como complejo invernal tradicional, es decir, abierto solamente durante la temporada de esquí, no tienen futuro.
Carús argumenta que “montar una estación de esquí comporta un gran volumen de dinero en activos fijos, que luego podría estar infrautilizado varios meses, por lo que si no hay otras cosas a parte del esquí esto no se sostiene”, en referencia a la rentabilidad económica.
3 ESTACIONES NUEVAS EN EL MUNDO, EN 30 AÑOS
“En los últimos 30 años se han inaugurado solamente en todo el mundo tres estaciones de esquí, una de ellas Boí Taüll”, explicó, y destacó que este complejo “es la estación del Estado español que más tiene que ver con un centro turístico recreativo de alta montaña”.
Infraestructuras
Señaló que un problema con el que se enfrenta el Pirineo es el de las infraestructuras, que instó que deben mejorarse. Así se congratuló de que finalmente se hayan empezado las obras de construcción del segundo túnel de Vielha.
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