Este inicio de temporada no ha sido de lujo por decirlo de alguna manera, en Port de Comte durante este mes de diciembre les han caído más de 200 litros de agua, si si, lo que leéis, agua y no nieve, pero incluso así, han podido abrir la estación.
Hasta hace pocos días y gracias al gran trabajo de sus magos, habían abierto la zona de debutantes y la pista Rasa Coma, una azul de más de 3km de largo, una buena y divertida pista, además con unas condiciones de nieve realmente buenas para lo que se podía pensar.
Pues bien, estaba esquiando allí este pasado 26 de diciembre y me comunican que a partir del 27 abren Estivella.
Como muchos sabéis, bien por experiencia propia o bien por haberlo leído algunas veces, Estivella es una zona de Port del Comte, una zona algo separada de la estación y que realmente es un mundo a parte.
Allí la innivación es totalmente natural y, a pesar de las lluvias, al tener una buena altura, la nieve conservó gran parte de su espesor anterior.
Hacía varios días yo pensé, si allí arriba está abarrotado de nieve, ¿por qué no abren? Pues bien, hablando con Albert Estella, director de la estación, me comentó que no es tan fácil. Cuándo no hay nieve para acceder allí, es muy complicado que las máquinas (ratracs y motos) puedan llegar sin romper cadenas, así que se las tienen que ingeniar para poder pisar pistas y abrir en condiciones.
Pero bueno, a lo que íbamos, después de un trabajo titánico, el día 27 de diciembre era el Gran Día, el día que no podía perderme, el día que abrían la joya de la corona.
Tan ansiada jornada llegaba sin que Txell ni tampoco los compañeros habituales de esquiadas pudieran disfrutarla, pero yo no me podía quedar en casa, así que para allí que iría.
Una de las suertes de esquiar en una estación familiar es que conoces a mucha gente, así que aunque subiera sólo, seguro que esquiaría acompañado, y así fue, al llegar al párking de Estivella, ya me encontré con unas cuántas caras conocidas, gente que sabía que estarían allí para no perderse el gran día., gente del Club de Esquí Port del Comte y del Club de Esquí Solsona.

Vaya mezcla, uno con esquís pisteros y yo con los Dynastar Legend de freeride, cómo íbamos al cielo de los esquiadores, pensé que sería buena opción sacarlos a pasear, jajaja.
El paisaje mientras íbamos subiendo se volvía cada vez más blanco.

Y al llegar al refugio, aunque todavía era cara sur, teníamos este panorama...


Una vez llegados allí, todavía teníamos que subir por el telesilla Estivella para llegar al paraíso.

Estas son las caras de alegría por ser los primeros esquiadores de Estivella de esta temporada.
Teníamos la gloria bajo nuestros pies, así que para abajo que íbamos!! Y tras el primer descenso en el que había una mezcla de ganas e ilusión, llegaba el que para mi sería un momento muy especial, me dejaron ser el primero en subir por el teleski y así inaugurar oficialmente Estivella. Desde aquí les doy las gracias a todo el grupo, ya que nunca había tenido este privilegio tras 37 años esquiando allí.


Teníamos la zona con un aspecto de postal, en cotas medias y bajas sufriendo, pero Estivella saliéndose como siempre.

Fuimos haciendo varias bajadas por toda la zona y disfrutando de la tranquilidad.
¿Os acordáis de un report de principios de la temporada anterior que se titulaba "Estación Privada"?, pues otra vez era igual. Estivella casi abierta para nosotros, pistas rojas y negras divertidísimas sólo para nuestro disfrute.
Con ese espectáculo nos preguntábamos...
¿Qué hace la gente en estaciones abarrotadas?
La verdad es que los locales de Port no lo entendemos, pero bueno, más tranquilos estamos, jajaja


En esta última foto podéis ver la cantidad de gente que está bajando la preciosa pista Els Bolets, y los que veis somos de la misma cuadrilla.
Unas bajaditas más y tocaba ir para casa a comer y trabajar, pero no sin antes disfrutar de unas vistas sin igual...

Desde allí arriba y emergiendo del mar de niebla que cubría media Catalunya, divisábamos Montserrat en el centro de la imagen, así como La Mola y el Montseny más para la izquierda.

Bajando por el telesilla podemos observar parte del Hostal, Sucre y Bòfia y la siempre presente Montserrat.
Una de las notas cómicas del día fue al llegar al párking y encontrarme con un muy buen amigo practicando su deporte favorito.

Eso es lo bueno de vivir más o menos cerca de tu estación, eso sí sus piernas se metieron 130km entre ida y vuelta con unas cuantas montañas de por medio...
Y vosotros, ¿sois de los que esquiáis en estaciones "privadas" o en estaciones llenas de aglomeraciones?
Por cierto, Feliz Año y que sea abundante en salud y nevadas!!!