Fotos/vídeo: Jesús Andrés Fernández
El sentido común dice que hay que hacer caso a la razón antes que al corazón. Afortunadamente, en algunas ocasiones no es así y la pasión hace realidad proyectos que la lógica descartaría. En el esquí ocurre a menudo…
JetsPlay es una nueva marca de esquís hispano-andorrana, que tiene detrás un proyecto industrial con varias plantas de producción distribuidas por Europa, un notable conocimiento tecnológico y un plan de comercialización internacional.
Pero, sobre todo, es una iniciativa dirigida por entusiastas del deporte y la nieve.
Especialistas en carbono
Carbosports es una distribuidora de artículos deportivos con base en Andorra, especialista en productos de carbono de alta calidad. El conocimiento de este material proviene de la compañía matriz, el grupo Carbotainer, puntera en el desarrollo, producción y venta de productos de carbono. Entre otros, fabrican piezas para aviones y componentes para motos de competición. Han desarrollado una botella de este material para el almacenaje y transporte de gases, mucho más ligera que las convencionales botellas de acero y que admite presiones más altas, con lo que pueden almacenar más gas.
Carbosports se aprovecha de este know-how y lo traslada al deporte, a través de su marca: JetsPlay. Palas de padel, una línea de piezas y componentes para bicis -todavía en fase de desarrollo- y, lo que nos interesa, esquís.
Esta temporada lanzan sus dos primeros modelos, con el carbono como material de base.
Los esquís
JetsPlay se estrena como fabricante de esquís con el All Mountain y el Touring. El primero es, tal y como indica su nombre, un esquí multicondición, con un patín entre 83 y 90 mm según la talla. Por su parte, el Touring supera los 90 mm de anchura de patín, pero está enfocado al skimo gracias a su ligera construcción.
Los esquís se fabrican en las instalaciones de la marca en Francia y España, a partir de un núcleo de álamo y haya. Los listones se cortan con máquina de CNC y los núcleos se fabrican por pares, a partir de las mismas piezas de madera, para buscar la máxima homogeneidad. Esta es una de las señas de identidad de JetsPlay: el trabajo simultáneo de cada par de esquís. De hecho, la prensa donde se fabrican también es doble; es decir, hace cada par conjuntamente.
Alrededor del núcleo se aplican diversas capas de carbono, tanto biaxial -con las fibras dispuestas en diferentes orientaciones-, como unidireccional, aramida y fibra de vidrio, configurando un conjunto muy ligero y, os avanzamos, con un comportamiento sorprendentemente bueno.
Ambos modelos tienen un perfil clásico, sin rocker, y en el caso del All Mountain su radio de giro es el mismo en todas las tallas.
Unos bastones muy especiales
JetsPlay ha aprovechado su conocimiento en el tratamiento del carbono para desarrollar un bastón de fibra, que también pudimos probar.
Tiene una arandela muy pequeña, que ayuda a que sea muy ágil, y la correa -diferenciada para mano izquierda y derecha- se sujeta con un perno de seguridad que salta en caso de necesidad. La empuñadura, sencilla pero muy ergonómica, está disponible en dos tallas, para manos grandes y pequeñas; una idea interesante.
El bastón se maneja con muy poco esfuerzo y tiene la rigidez necesaria para transmitir el apoyo con precisión, sin perder la capacidad de absorción que caracteriza a los bastones de carbono.
Un exquisito complemento a juego con los esquís de la marca.
Un martes en Grandvalira
A primera hora de la mañana nos encontramos con Adrien Janot, director de marketing y ventas de Jets Play, y con Héctor Júlvez, jefe de desarrollo de producto, en el parking de El Tarter, en Grandvalira. Héctor es un viejo amigo: durante años formó parte del equipo de pruebas de Esquí Pro y hemos compartido innumerables jornadas de test, tanto de esquís como de botas.
El staff de JetsPlay ha preparado diversas unidades del All Mountain, con las que recorreremos las pistas del dominio andorrano.
A pesar de ser un martes, hay mucho movimiento y la estación está muy concurrida, así que no perdemos tiempo y tomamos el telecabina que nos sube a Riba Escorxada. El día, despejado y fresco, promete.
Mientras subimos, Héctor nos comenta algunos detalles de la marca y de los esquís. Está en el proyecto desde sus inicios -una bonita historia de apasionados por la nieve- y ha sido el responsable del equipo técnico que ha puesto a punto los esquís, pasando muchas horas sobre el terreno, trasladando las impresiones a los ingenieros y probando todas las evoluciones que iban aplicando a los prototipos hasta conseguir los resultados deseados.
Nos explica algunas curiosidades del proceso de fabricación, como que han diseñado su propio estructurado de suelas o que el radio de giro del esquí es el mismo en todas las tallas, para conseguir el mismo comportamiento con independencia de la medida elegida.
El inimitable tacto del carbono
A pesar de que está siendo un invierno de poca nieve, las pistas de Grandvalira ofrecen un aspecto magnífico. Tomamos el telesquí Tosa Espiolets y nos dirigimos al punto de salida de la mítica pista Àliga de la Copa del Mundo.
Héctor me apunta que han buscado una respuesta polivalente, un esquí que pueda ser utilizado por un amplio abanico de esquiadores; pero que se le puede exigir sin dudar y que, a pesar de su ligereza, el All Mountain es sorprendentemente estable.
Efectivamente, desde el momento que te lo calzas el JetsPlay se nota muy liviano, una sensación propia de los esquís con mucho carbono en su interior.
Me tomo las primeras curvas con calma, para sentir sus reacciones, dejándolo deslizar en su propio radio de giro. A velocidad media es dócil y manejable, tiene un cambio de canto ágil y sin esfuerzo, a pesar de su patín de 88 mm en la medida 179 cm que estoy probando. No echo de menos el rocker; al contrario, el esquí mantiene una buena estabilidad sobre la nieve.
Tras esta primera toma de contacto, ganamos desnivel con la silla Llosada y nos vamos a buscar el terreno abierto de las pistas altas de El Tarter.
Tengo que reconocer que la ligereza del esquí me frena un poco a la hora de aumentar el ritmo y buscar la velocidad… hasta que Héctor se pone delante, acelera y me obliga a apretar los dientes para no perder su estela. En la amplitud de la pista Tamarro, compruebo como el JetsPlay acepta una conducción decidida sin perder la compostura, mostrando un carácter deportivo que no aparenta cuando esquiamos tranquilos.
Es el tacto único de los esquís con mucho carbono en su interior, que aúna ligereza, estabilidad y una gran capacidad de adaptarse a ritmos muy diversos.
Ya a la venta
Tanto el All Mountain como el Touring están disponibles en tres diseños diferentes, uno de ellos pensado para el público femenino.
La marca ya ha iniciado el proceso de comercialización, con presencia en España, Andorra, Italia y Francia como primera fase de un ambicioso plan de internacionalización. Se venderán exclusivamente en tiendas físicas y en la web de Carbosports, para garantizar tanto el servicio al cliente como los precios.
Respecto de esto último, el All Mountain cuesta 699 € y el Touring 749 €, en ambos casos sin fijación.