Queridos amigos, aquí estoy de nuevo, dispuesto a contaros cómo ha sido este último fin de semana en la nieve. Y ya os adelanto una cosa: ha sido maravilloso.
Como sabéis, la semana anterior estuve por ahí de aventuras y esta semana quería poder disfrutar con la familia en la nieve. Una de las mejores cosas que podemos hacer los esquiadores.
Para ello me puse a disposición de mis hijos, pues tenían pendiente el poder elegir algunas actividades que se pueden hacer en la nieve además de esquiar, como premio a su esfuerzo durante el trimestre pasado y, en general, a su buen comportamiento. Normalmente somos los padres los que decidimos qué vamos a hacer el fin de semana, pero ésta ha sido una excepción. Y no me arrepiento de ello. Al contrario, nosotros también nos lo pasamos de maravilla.
Sábado 28.
Antes de nada fui a alquilar unos esquís a "SKIIZ" porque no tengo ahora unos polivalentes pisteros para disfrutar con la familia tranquilamente. Tenéis que aseguraros siempre de que los ajustes os los haga un buen profesional.
El sábado comenzamos la mañana en Canillo, en una de las partes que Grandvalira tiene destinada al disfrute de los más pequeños. Es la zona de “Mont Magic”, un espacio destinado sobre todo al disfrute de los más pequeños.
Al llegar, lo primero que hicimos fue esquiar un poco y visitar la pista de Mont Magic, que está pensada para los niños y que es bastante divertida y larga. Se accede a través de la pista Rossignol, que estaba perfecta y la disfrutamos un par de veces. ¡Cómo estaba la nieve!
Un poco más tarde nos encontramos con los divertidos personajes de Mont Magic que invitaron a los niños a hacer una bajada con ellos. Justo estábamos en ese punto en el que querían dejar los esquís y descansar un poco, sin embargo no perdieron ni un segundo y siguieron esquiando para hacerlo con los personajes. Estuvo muy bien.
Mientras estábamos cogiendo fuerzas en el restaurante apareció un perro husky precioso del que quedaron prendados mis hijos. Así que empezamos a jugar con él y el dueño era, precisamente, Ramón, uno de los responsables de Mont Magic y que fue súper amable con nosotros. Nos invitó a hacer parte del recorrido que se suele hacer con raquetas y así poder pasear un poco con Alai, que así se llamaba el husky.
(Podéis pinchar en la fotos si queréis ampliarlas)
Ya sabéis qué pasa cuando unos niños se enamoran de un perro. Así que echamos un rato de lo más agradable en el que, además, pudimos disfrutar de un recorrido espectacular. Con la estación repleta de nieve recién caída y sin que hubiera pasado nadie antes que nosotros. Nos llevamos un recuerdo precioso, muy distinto de lo que es un rato de esquí habitual.
Hablando con Ramón y viendo cómo estaban los niños con Alai, decidimos ir a El Tarter esquiando a ver si podíamos hacer un paseo en trineo tirado por perros (mushing). Por el camino estuvimos esquiando un poco en la zona de Encampadana, a la que todavía no habíamos podido ir esta temporada. Estaba espectacular pero no pudimos hacer más de dos bajadas para poder llegar a tiempo.
Y llegamos, pero estaban todas las actividades programadas y no lo pudimos hacer, fue una pena, pero allí pudimos disfrutar un rato de cinco cachorros que, como no, hicieron las delicias de los niños por un buen rato.
Pero teníamos que volver, el plato fuerte de los niños estaba por llegar, y había que ir con un poco de tiempo.
Así, fuimos de nuevo a la zona de Mont Magic a disfrutar de una tirolina espectacular, con 550 metros de recorrido y a 40 metros de altura. ¡Increíble! Si os digo la verdad, conforme llegaba el momento me iba pesando un poco la decisión, pero una vez hecho ya os adelanto que tengo muchas ganas de volverlo a hacer.
Antes de hacerlo te pesan para ajustar los arneses a tus necesidades y nos decidimos por hacer un tándem el niño y yo, ya que él no daba el peso mínimo para hacerlo solo y mi hija lo disfrutaría sola.
Creo que las fotos hablan por si solas. ¡Es una pasada! Estoy seguro de que en verano repetimos. Como curiosidad os digo que en el momento de salir el niño se arrepintió de repente, pero Manel, uno de los chicos que se encarga de la actividad, lo tranquilizó y no solo le encantó, sino que quiso repetir inmediatamente.
Después de la tirolina y de toda la mañana de esquí y actividades decidimos que era buen momento de dejar la estación, con tanto ajetreo nos dieron las 4 de la tarde sin comer. Así que comimos justo en la salida del telecabina. Nunca habíamos estado allí, pero nos encantó. "Chef Amadeo", un buen sitio para toda la familia.
Para terminar la tarde de una jornada buenísima, asistimos en el Palau de Gel a la proyección gratuita de la película de "Freeride" "La Liste", un peliculón de esquí que os recomiendo si todavía no la habéis visto.
Domingo 29.
El domingo el día amaneció buenísimo y decidimos ir a Grau Roig a seguir con el esquí familiar pensando en los niños más que en nosotros. Bueno, a decir verdad, también pensando en nosotros, porque, no os lo vais a creer, hacía años, varios años, que no esquiábamos solos mi mujer y yo.
Así que cogimos unas horas de clase para los niños y un par de actividades súper divertidas para que ellos tuvieran su rato de aprendizaje y esquí, pero también de diversión. En Grau Roig está el programa Imaginarium, y que me parece muy buena idea. Además de tomar las horas de clase de esquí, los niños tienen un par de actividades, en nuestro caso hicieron mini motos de nieve y tubing.
La mañana estaba increíble y la nieve prácticamente perfecta. Lógicamente se nos hizo muy corto, pero lo disfrutamos mucho y ahora todos tenemos ganas de repetir de nuevo.
Por último, comimos en el comedor "self service" que el programa Imaginarium tiene previsto para los niños. Está muy bien, creo que vale la pena y es cómodo comer a pie de pista. En nuestro caso dejamos la estación justo después de comer, pero es buena opción también para seguir esquiando por la tarde.
Quiero dar las gracias especialmente a Juan Pablo, que fue quien se encargó de llevar a los niños a las actividades y a comer, muy amable todo el personal de Grandvalira con el que hemos tratado estos días. Me parece muy importante ya que son las personas que están en contacto directo con los niños.
Hay que tener en cuenta que esquiar nos gusta mucho a todos, pero las estaciones tienen recursos nuevos y variados para que los niños, y los no tan niños, puedan disfrutar de la nieve además de esquiando. Y creo que es importante, porque los chicos tienen que ir a la nieve con alegría y, aunque la actividad principal sea el esquí, hemos aprendido que también hay otras cosas muy divertidas y que les encantan.
Ya sé que todos los que estamos aquí somos unos forofos incondicionales del esquí, sobre todo estando la estación como estaba, repleta de nieve para disfrutar de las pistas y del fuera de pista. Si os digo la verdad, a primera hora del sábado me debatía entre coger los esquís gordos e irme a disfrutar del fuera pista o seguir el plan que teníamos pensado y disfrutar de la nieve en familia. Pero ahora, una vez pasado el fin de semana y después de haberlo disfrutado tanto os puedo decir que, con toda seguridad, tomé la decisión adecuada. Al fin y al cabo días de nieve polvo seguirá habiendo, pero los hijos crecen muy deprisa y tengo que aprovechar este tiempo.
Os dejo un breve video resumen de otro que he hecho para el álbum familiar.
Esqui? familiar. from Alvaro Urzaiz on Vimeo.
Saludos a todos, vuelvo en breve con el artículo que tengo pendiente.