El viaje lo empezamos mi hermano Mario desde Barcelona y yo desde Madrid el viernes 28 por la tarde. Los dos viajamos a Milán Malpensa y allí alquilamos un coche para ir a la ciudad de Aosta a aproximadamente 1h45. En vista de la que se nos venía encima (todavía no éramos conscientes) ya llevamos nuestras mascarillas por si las moscas.
Cómo veis nada tienen que ver con las higiénicas ni las FFP2 de ahora.
El avión Madrid – Milán iba vacío como podéis ver.
Tanto Mario como yo facturamos una maleta en bodega y nos llevamos todo nuestro material incluyendo botas. Solamente alquilamos esquís y bastones allí. El precio es parecido al de España/Andorra.
Os dejo una bonita vista de los Alpes desde la ventanilla del avión rumbo a Milán.
Una vez llegamos a nuestro apartamento en Aosta y tras cenar hicimos el briefing de los lugares donde esquiar. La climatología nos marcaba buen tiempo sábado y domingo, mucha nieve el lunes y buen tiempo el martes otra vez. El plan que montamos fue dedicarle el sábado completo a Cervinia – Valtournenche, el domingo pasar de Cervinia a la parte suiza de Zermatt, el lunes que iba a nevar bastante ir a La Thuile donde pensamos que la zona arbolada podría permitirnos esquiar decentemente y el martes día de vuelta estar a las 8:00h en el telecabina de Pila para esquiar hasta las 12:30, ducha, comer e ir al aeropuerto de vuelta a casa. El plan pintaba bastante bien.
Día 1 Sábado 29 de febrero
Nos levantamos a las 7:00 en nuestro apartamento de Aosta ciudad, desayunamos y partimos dirección Valtournenche. Allí al llegar alquilamos esquís para dos días puesto que el domingo íbamos a esquiar en el mismo complejo, pero en la parte suiza de Zermatt.El objetivo del día era recorrer toda la parte italiana desde Valtournenche hasta Cervinia. Empezamos subiendo en el telecabina de la primera localidad y al ver esta pista vacía y tan bien pisada no pudimos evitar bajarla antes de ir dirección Breuil-Cervinia.
Una vez hecha esta primera bajada de nuestro recorrido nos dirigimos hacia el valle de Cervinia con el Monte Cervino o Matterhorn presidiendo. Durante la mañana no pudimos verlo ya que había nubes que lo tapaban, pero el día empezaba a despejarse como indicaba la previsión.
A nivel particular la parte italiana de este complejo no me parece tan bonita como la parte suiza pero en lo que al esquí y pistas se refiere me gusta más. No olvidemos que se puede bajar desde el Plateau Rosa (3480m) hasta Valtournenche pueblo (1524m) solamente cogiendo un pequeño telesilla de unos 200m de largo que apenas tiene gente. La cantidad y calidad de pistas rojas de esta parte de la estación hacen que merezca dedicarle almenos un día completo.
Al cabo de un rato de recorrer esta fantástica estación, susto incluido por la pérdida de una mochila en un telesilla fruto de la emoción que por suerte recuperamos, el Monte Cervino o Matterhorn se dejó ver por fin para nuestro júbilo.
Cuando las piernas nos empezaron a flaquear decidimos que el día de esquí era suficiente y nos dirigimos al ya nombrado Plateau Rosa para hacer la gran bajada de esta estación.
Aquí vemos a Mario con la Testa Grigia a su espalda y la pista roja que baja de ella.
En esta foto ya vamos dirección Valtournenche donde se puede ver el único y pequeño telesilla que hay en esta bajada tan larga.
Paisaje tras bajar del telesilla nombrado anteriormente.
En el recorrido hicimos una parada en boxes para repostar y que mejor combustible que un Bombardino. Bebida típica de los Alpes Italianos que te da el calor suficiente para el último esfuerzo antes de terminar el día de esquí.
Foto de la parte baja de la estación y el valle de Valtournenche.
Gran día de esquí cómo podéis ver.
Día 2 Domingo 1 de marzo
Tras el gran día de esquí del sábado y tras unas cuantas Moretti a la hora del aperitivo italiano, el domingo mismo protocolo, 7:00 en pie y rumbo a Breuil – Cervinia en este caso en vez de a Valtournenche. El objetivo era pasar lo antes posible al lado suizo vía Theodulpass. Elegimos esta vía en vez de la del Plateau Rosa porqué solo hay que tomar un telecabina, después te pones los esquís y enlazas tres telesillas que te llevan directo al descenso al glaciar de Zermatt. Durante la noche hubo nevada y el aspecto era inmejorable, pura nata.Para visitar la parte suiza escogimos un comentario del compañero“The Dude” del foro Nevasport para hacer nuestro recorrido. Adjunto el link
Desde el paso Theodul bajamos todo el glaciar de Zermatt hasta Furi enlazando pistas rojas y una negra. Esta bajada es espectacular, de lo mejor de Zermatt. Una vez llegados a Furi tomamos el telecabina que nos llevaba a Riffelberg.
Al llegar a Riffelberg nos dirigimos a la estación del tren cremallera que te lleva a Gornergrat.
En Gornergrat vale la pena perder 10/15 minutos fotografiando el Matterhorn y el Monterosa.
Matterhorn aún con nubes con la vía del tren cremallera y las pistas que descienden desde Gornergrat.
El Monterosa, pico más alto de Suiza y segunda cota más alta de los Alpes tras el Montblanc.
Foto de rigor para probar que estuvimos ahí e inicio de la bajada, ahora dirección Gant.
Llegados a Gant nos dirigimos a Rothorn con un telesilla y una góndola. Una vez arriba disfrutamos estas fantásticas vistas.
Desde Rothorn nos dispusimos a bajar hasta Zermatt pueblo haciendo todo el recorrido por pistas rojas de con muy buenas vistas y desde donde pudimos hacer la típica foto de las postales.
Ya de vuelta a Cervinia tomamos un autobús eléctrico en la llegada a Zermatt. Este nos llevaba al inicio del telecabina que conduce aTrockenerSteg. La última salida desde TrockenerSteges a las 15:30h y conviene no apurar con el tiempo. Una vez ahí tomamos la góndola que nos lleva a Klein Matterhorn donde cruzamos la montaña por un túnel para posteriormente iniciar el descenso a la Testa Grigia y a Cervinia.
La tarde era más fría que la anterior y tras empezar el descenso a Breuil - Cervinia paramos a tomar otro Bombardino igual que el día anterior.
Terminamos el día con unos kilómetros menos que el día anterior pero muy contentos con nuestra visita y recorrido por Zermatt. Los paisajes son muy bonitos y las pistas son excelentes.
En conjunto Cervinia – Valtournenche más Zermatt es un complejo espectacular donde esquiadores de nivel medio alto disfrutarán. Nosotros le dedicamos un día a cada país, pero bien se le pueden dedicar cuatro o cinco días a todo el complejo.
Día 3 Lunes 2 de marzo
El domingo por la tarde tras devolver nuestros esquís en Valtournenche y alquilar en Aosta para los dos siguientes días volvimos a tomar el aperitivo en un bar justo al lado del arco de triunfo romano de Aosta. Ahí comentamos que el lunes sería un día de esquí complicado porqué marcaban una buena nevada, aunque no marcaban viento en La Thuille, la parte italiana el Espace San Bernardo que se compone por la esta localidad italiana y por la francesa La Rosiere.Arco romano de Aosta y aperitivo.
El protocolo fue el mismo de cada día, 7:00h en pie y rumbo a pistas. Ese fin de semana se había celebrado la prueba de copa del mundo de descenso femenino y pudimos ver tanto el pódium como parte del trazado.
Al llegar la nieve ya caía a plomo y en taquillas nos indicaron que el enlace con La Rosiere estaba cerrado porqué en la vertiente francesa soplaba fuerte el viento. Nos quedamos en la parte italiana donde la visibilidad no era del todo mala, la nieve era recién caída y de una calidad excelente. En la parte baja entre árboles pudimos esquiar muy a gusto.
Como no hoy con ambiente más frio que ayer, nos tomamos el ya típico Bombardino para entrar en calor.
Tras la parada seguimos esquiando para aprovechar el día. La nevada seguía cayendo sin parar, pero sin viento. Aún así disfrutamos muchísimo ya que la estación estaba prácticamente vacía y a veces parecía que estábamos totalmente solos por el silencio que había. Mencionar los 30cm de nieve nueva a nuestros pies.
Al final salvamos el día y disfrutamos de esta gran estación en la que ya habíamos esquiado otras temporadas. Nos gusta muchísimo y al terminar nos dimos elmerecido homenaje en uno de sus restaurantes.
Aquí los dos registros que tomé del día.
Al salir de comer esta era la estampa que nos encontramos.
Día 4 Martes 3 de marzo
El martes era nuestro último día, por la tarde teníamos los vuelos, Mario a Barcelona y yo a Madrid. Pila era el destino, la estación urbana de Aosta. Acceder a pila es muy sencillo. Desde la misma ciudad de Aosta tienes un telecabina que te pone en 20 minutos en pistas. Abre a las 8 de la mañana. En nuestro apartamento nos dejaron hacer el check out a las 14h con lo cual el plan no podía salir mal. Nos daba tiempo a esquiar, ducharnos, comer y llegar al aeropuerto.Misma hora de cada día en pie, preparar un poco la maleta y nada más abrir el telecabina subir. A las 8:20h estábamos esquiando.La ciudad de Aosta desde el telecabina de Pila.
Esquiamos unas cuatro horas. Pila tiene unos 70 kilómetros de pistas y unas vistas inmejorables de cinco colosos de los Alpes (Monterosa, Cervino, Grand Combin, Montblanc y Gran Paradiso). El último no pudimos verlo porqué para ello tienes que subir a la cota más alta de la estación y asomarte por detrás. A causa de la nevada del día anterior había peligro de aludes y los artificieros estaban en plenas maniobras. Como veisdía era perfecto, buena nieve, sol, ambiente seco…
En esta foto y en la anterior podéis ver el estado inmejorable de las pistas.
Pila tiene pistas para todos los niveles, pero las que más nos gustaron fueron las de las cotas altas y las pistas rojas (creo que son la 1, 2 y 3) que hay entre árboles de la parte izquierda de la estación. Pistas anchas con buena pendiente y muy divertidas.
Pistas de Pila y en el centro el Montblanc por encima de las únicas nubes que se veían.
Desde la cota más alta a donde pudimos acceder podíamos ver a la vez el Monterosa a la derecha, a su izquierda el Cervino y a la izquierda de la foto el Grand Combin además de Aosta en el valle.
Tras las cuatro horitas de esquí en Pila este es el registro que nos quedó.
Tras dejar los esquís nos fundimos en un gran abrazo por los cuatro grandes días de esquí que pasamos. Recomendamos el valle de Aosta sin duda. Además de las cuatro estaciones en las que estuvimos, nos quedó por visitar el dominio de Monterosa que ya conocíamos, Courmayeur y la pena de no poder acceder a la parte francesa de La Rosiere desde La Thuile. Hay estaciones para ir una semana completa.
En cuanto a nuestra forma de montar el viaje, el punto diferencial que vimos de viajar en avión es que puedes esquiar el mismo día que vuelves a casa a parte de la comodidad. Haciendo números y comparando con otros viajes que habíamos hecho a Alpes yendo en coche es que lo que recortas en días de alojamiento y gasolina te puede compensar el alquiler de esquís y coche a parte de la comodidad de salir el viernes por la tarde de casa y llegar a cenar a Aosta. El alojamiento en Aosta es barato. El punto negativo es quesi vas pocos días, coincida con mal tiempo y no puedas esquiar como nos gusta a todos. En este caso la jugada salió bien. Espero que os guste este reportaje, lo he escrito con mucho cariño y con muy buen recuerdo. Recomiendo escribir de algo que os traiga buenos recuerdos. Es volver a saborearlo y reconforta en estos tiempos tan inciertos.
David Hurtado.